Eurofragance crea fragancias a la vez que cuida de las personas y del planeta, y cree que la innovación es una palanca fundamental para conseguir sus objetivos ambientales y sociales. En su intervención, Diana March, global director of Sustainability and Technical Compliance de Eurofragance, explicó que la compañía entiende “la sostenibilidad desde un punto de vista holístico, es decir, abarcando sus tres dimensiones: las personas, el planeta y la buena gobernanza. Y esta visión la hemos trasladado a cuatro ejes estratégicos, la seguridad, la comunidad, la ética empresarial y los recursos”.
Una visión holística de la sostenibilidad que ha trasladado a también a su paleta de ingredientes bajo el acrónimo ICON: Innovación, Compromiso, Origen y Naturaleza. “ICON es una estrategia innovadora mediante la cual podemos identificar aquellos ingredientes de nuestra paleta que no únicamente tienen una calidad excepcional, sino que también aportan valores de sostenibilidad”, explicó Diana March.
Para ser un ingrediente icónico, no basta con tener un perfil olfativo singular. También debe aportar valores sostenibles como que provenga de material reciclado, sea biodegradable o no utilice disolventes. “Desde hace unos años, nuestros equipos de Innovación y Desarrollo trabajan para incorporar los principios de la química circular a la hora de innovar en nuevos ingredientes que llamamos cautivos y son para consumo propio”.
Así pues, siguiendo el principio de la economía circular la compañía lanzó su primer ingrediente cautivo: L’Âme du BoisTM. “A partir del residuo que se genera en la industria de la madera, el serrín, conseguimos un ingrediente de alta calidad perfumística y con un perfil amaderado sin cortar ningún árbol. Luego, de la fracción que no utilizamos para fabricar el L’Âme du BoisTM, obtenemos el VerdenixTM, un ingrediente que es doblemente reciclado que, además, tiene propiedades para contrarrestar los malos olores. El tercer ingrediente que hemos lanzado se llama EuphorionTM, un ingrediente sintético que conseguimos con muy baja energía, sin utilizar agua y con el que generamos un residuo mínimo”, explicó la directiva.
Pero Eurofragance no únicamente trabaja la innovación a través de los ingredientes. “Nuestro lema es ‘Creamos fragancias y cuidamos de las personas y del planeta’, porque queremos generar un impacto positivo gracias al conocimiento que tenemos de las fragancias. Tanto es así que, desde hace unos años, hemos trabajado con el hospital de Sant Joan de Déu de Barcelona y con la empresa MartiDerm para desarrollar una solución que nos permita luchar contra la enfermedad del olor de pescado”, ´concluyó
Con una trayectoria de más de 70 años, Sorigué impulsa el crecimiento responsable a través de la innovación, la gestión del conocimiento y la sostenibilidad. Creando soluciones y oportunidades con responsabilidad y confianza, compartiendo su conocimiento para aportar valor a la sociedad y en los sectores en los que son referente. Trabaja en el fomento de una cultura innovadora que se traduce en la valorización y desarrollo de nuevas soluciones para productos y servicios.
En su intervención, la directora de RSC y Cumplimiento del Grupo Sorigué y delegada de DIRSE Cataluña, Miriam Porres Faba, explicó: “Sorigué es una empresa familiar especializada en la producción de áridos y tratamientos asfálticos como principal actividad. Nuestro impacto es grande, queríamos mantener la actividad, pero sabíamos que debíamos transformarnos. Sabíamos que teníamos que tomar una decisión valiente que era transformar nuestros productos y nuestros procesos. La clave fue poner la sostenibilidad y la innovación en medio de todos nuestros planes estratégicos. Son temas transversales que, además, suponen un vértice de crecimiento. No debemos ver la sostenibilidad como una obligación, sino como una gran oportunidad”.
Precisamente esta visión es la que ha permitido “crecer a la empresa, continuar con nuestro con nuestro propósito - Crear soluciones, compartirlas y perdurar-, ser sostenibles y ser referentes en todas aquellas áreas en las que tenemos actividad: el ciclo del agua, las ciudades, las infraestructuras, los materiales, la edificación y la energía”, comentó Miriam Porres.
Como muestra de su compromiso con las ciudades y todos sus habitantes, “cuando hablamos de practicar la economía circular, no solamente nos referimos a reaprovechar nuestros recursos, sino que también nos estamos refiriendo a la instalación de carreteras con asfaltos sostenibles, compuestas por material reciclado de firmes antiguos y polvo de caucho. O estamos trabajando en el sector de la construcción para generar productos alternativos al hormigón y al acero con restos de sus propios residuos”, añadió.
