Durante el evento, Isabel Tocino, exministra de Medio Ambiente y actual vicepresidenta de Banco Santander España, afirmó que “cuando hablamos del cambio climático es importante entender que nos afecta a todos. La sostenibilidad te atrapa, es una forma de vida y una nueva filosofía de inversión que trae nuevas oportunidades de negocio para generar valor económico y también en las personas. Por ello, debemos incorporar los riesgos climáticos en el día a día de las decisiones”.
Por su parte, José Luis de Mora, CFA, presidente de CFA Society Spain, declaró que “la sostenibilidad se ha convertido en un pilar fundamental del trabajo de los profesionales de la inversión. Para afrontar este reto debemos formarnos lo mejor posible, porque la buena voluntad no es suficiente, hay que disponer de criterios comunes y aceptados. Fruto de esta necesidad y de fortalecer la integridad de los mercados nace nuestra certificación ESG Investing”.
En el panel organizado sobre los Desafíos, oportunidades y soluciones de sostenibilidad en la industria de la gestión de activos en la actualidad participaron los miembros del Comité de Sostenibilidad de CFA Society Spain: Augusto Caro, CFA, CAd- Global Head of Sustainability, Santander AM; Juan Elorduy, CFA, CAd, Partner de Elona Capital; Pablo Bascones, Partner y responsable de sostenibilidad y cambio climático de PwC España; e Íñigo Serrats, CFA, Managing Partner y cofundador de Impact Bridge.
- La ONU estima en 12 billones de dólares las oportunidades de negocio que se abren a la sostenibilidad, lo que calcula podría generar 800 millones de nuevos puestos de trabajo.
- Las nuevas generaciones ya exigen ser sostenibles, de ahí la importancia tanto de la formación como de alcanzar la neutralidad climática en 2050.
- La inversión de impacto de calidad tiene el potencial de contribuir a la solución de algunos de los mayores retos a los que se enfrenta la sociedad.
- La intención es la clave: los profesionales de la inversión de impacto tienen una doble responsabilidad fiduciaria, tanto con los inversores como con los beneficiarios últimos de las inversiones −en muchas ocasiones, colectivos vulnerables situados al final de la cadena de valor.
- Cualquier fallo ético en la cadena de valor da al traste con el fin primordial de la inversión sostenible o la utilidad para el beneficiario último de aquella.
- La regulación en sostenibilidad es joven todavía, debe ser flexible y acomodarse a los tiempos.
- Los retos para los gestores de fondos residen en la educación. Debemos tender los puentes necesarios para que el conocimiento llegue a los inversores y a la sociedad.
- La inversión en sostenibilidad necesita de talento y profesionales bien formados.
- La industria financiera, el tercer sector y el mundo académico se necesitan para trabajar de forma coordinada en soluciones a los grandes desafíos de la humanidad.
- Integrar la ética en la inversión sostenible es esencial para no dejar lugar a los tramposos del greenwashing y el impact washing.
Cerrando este I Evento Anual de Sostenibilidad, Rachida Justo, directora de la Cátedra Impact Bridge-IE, afirmó que “la aceleración y multiplicación de los retos sociales y medioambientales a nivel global ha propulsado un creciente interés por la inversión de impacto. varios estudios demuestran que los inversores de impacto generan un gran valor para las empresas sociales, ayudándoles a acometer su potencial. La cátedra trabaja en la actualidad en el desarrollo de una herramienta que recoge las mejores prácticas de los fondos de inversión de impacto europeos que ayudará a identificar las múltiples formas para crear valor social o medioambiental más allá del retorno financiero”.