En un contexto en el que las formas de comunicar sobre sostenibilidad y medioambiente han cambiado, las redes sociales ofrecen la oportunidad de concienciar sobre el cambio climático y otros problemas ambientales de forma amena y didáctica. Durante el encuentro, los participantes reflexionaron sobre las nuevas formas de hacer divulgación y sobre el potencial de las redes sociales como generadoras del cambio.
Belén Hinojar y Carmen Huidobro, fundadoras de Climabar, explicaron cómo buscan concienciar sobre la emergencia climática de una forma diferente y cercana. Así, ambas compartieron los diferentes formatos que utilizan y analizaron las claves para comunicar y llamar la atención de la audiencia de una forma creativa y con nuevos formatos para conseguir que cale el mensaje a favor del medioambiente. Y es que desde Climabar insisten en que es necesario “romper la burbuja verde y llegar a toda la sociedad, no concienciar solo a los que ya están concienciados”. Asimismo, las fundadoras de Climabar aplaudieron la política pionera contra desinformación climática de la plataforma digital Pinterest.
Por su parte, Rafa Magaña, CEO de Mazinn, reflexionó sobre cómo conectar con la generación Z, una generación con nuevos referentes y que todavía tiene mucho recorrido en materia de concienciación con el medioambiente. En ese sentido, puso en valor la importancia de entender las características y el lenguaje propios de cada red social a la hora de crear contenido para poder conectar realmente con los distintos perfiles de audiencia.
Por último, Paula Blondie, creadora de la cuenta de TikTok Blondiemuser, analizó cómo se puede traspasar la pantalla para, a través de las redes sociales, lograr una acción colectiva real, algo que busca conseguir a través de sus mensajes de defensa de la naturaleza y de los consejos que da a sus seguidores. A través de su lema ‘Pequeños grandes cambios’, explicó cómo conecta con su comunidad para concienciar “sin agobios, sin eco ansiedad”, destacando la importancia de los pequeños gestos a favor del planeta y apostando por una comunicación empática y no alarmista.