La iniciativa ganadora brinda apoyo integral a mujeres refugiadas que se encuentran en la recta final de su embarazo o con menores lactantes. Estas mujeres conviven, junto a sus familias, en el Elna Maternity Center, un centro de acogida ubicado en Atenas, donde se les proporciona alojamiento y manutención, así como apoyo legal, educativo, psicosocial y sanitario hasta que puedan conseguir el asilo político y un trabajo con el que subsistir. Actualmente, en el centro viven unas 90 personas (la mitad de ellos, menores) procedentes de países que se encuentran en conflicto como Afganistán, Siria, Irán y República Democrática del Congo, las cuales viven gracias a la caridad y al trabajo multidisciplinar que desarrollan los voluntarios.
Este proyecto cuenta con la participación de ocho alumnos de la Universidad Complutense de Madrid, la Universitat Oberta de Catalunya, la Universitat de Barcelona, la Universidad de Murcia, la Universidad de Deusto, la Universidad Internacional de la Rioja y la Universidad Internacional de Valencia, los cuáles se trasladan a Atenas de forma temporal para asistir a los residentes del centro.
Este proyecto ha sido reconocido entre un total de 78 candidaturas presentadas en las que han participado cerca de 2.000 alumnos de 57 universidades y 73 ONG. Además de este proyecto, la Fundación Mutua Madrileña ha premiado otras cinco iniciativas de voluntariado con 5.000 euros cada una.
Los otros cinco proyectos galardonados son los siguientes:
“Vivir juntos cambia vidas” es una iniciativa en la que participan tres alumnos de la Universidad Complutense de Madrid, la Universidad Francisco de Vitoria y la Politécnica de Madrid, en colaboración con la Fundación Hogares Lázaro, que promueve la convivencia de jóvenes con personas sin hogar que han sido “rescatadas” de la calle. Además de proporcionarles un techo y la manutención necesaria, los beneficiarios adquieren habilidades sociales y laborales con el objetivo de lograr su reinserción en la sociedad.
“Voluntariado contra la brecha digital” es un proyecto puesto en marcha por alumnos de la Universidad Complutense de Madrid, la Rey Juan Carlos y la Saint Louis University Madrid, junto a la Fundación Sanders, que trata de proporcionar competencias digitales a niños en situación de riesgo de exclusión social. La formación se hace con equipos informáticos que han sido desechados por empresas o particulares y que, previamente, los voluntarios se han encargado de reacondicionar para su buen funcionamiento, promoviendo así la economía circular.
“Capicúa” está promovido por estudiantes de la Universidad Carlos III de Madrid, la Universidad Autónoma de Madrid y la Universidad de Sevilla, que cuenta con el respaldo de la Asociación Sacapuntas. El proyecto transcurre en la barriada madrileña de la Cañada Real, donde los voluntarios brindan apoyo escolar y de ocio a los menores, con el objetivo de mejorar su educación y evitar el aislamiento social.
“Talha: sala móvil de psicomotricidad” es un programa de voluntariado impulsado por17 alumnos de la Universidad de Zaragoza, en colaboración con la Asociación Juvenil Colectivo Saharaui LEFRIG. El proyecto trata de proporcionar rehabilitación fisioterapéutica a personas con algún tipo de discapacidad funcional que viven en los campamentos de refugiados saharauis de Tinduf (Argelia).
“Juntos caminando hacia la inclusión” es una iniciativa desarrollada por 60 alumnos de CUNEF y la Fundación Oxiria, a través de la cual, los universitarios realizan actividades de refuerzo académico, deportivas y de acompañamiento a personas con diversidad funcional. Ambos colectivos, alumnos y beneficiarios, estudian en el campus de CUNEF y es durante los recreos de la jornada lectiva cuando se producen estos momentos de intercambio cuyo objetivo es fomentar la inclusión de los jóvenes con discapacidad en un entorno normalizado y mejorar su empleabilidad.
Las universidades españolas impulsaron durante el curso pasado 2020-2021 más de 1.800 iniciativas de voluntariado en las que colaboraron alrededor de 10.500 alumnos, según se desprende del IX Estudio sobre Voluntariado Universitario realizado por la Fundación Mutua Madrileña.
Este estudio refleja algunos cambios en el voluntariado universitario motivados por la pandemia. Las universidades han centralizado sus proyectos solidarios en nuestro país. De este modo, nueve de cada diez iniciativas han transcurrido en el entorno local, especialmente en los ámbitos relacionados con la atención a la infancia vulnerable, los colectivos en riesgo de exclusión social y las personas con diversidad funcional.
También se observa una mayor duración en la continuidad los proyectos. Así, el 86% de los programas que se realizan a través de la universidad se prolongan durante más de tres meses, un 10% más que el curso anterior, lo que indica un compromiso de los estudiantes con las causas solidarias a medio y largo plazo.