A lo largo de las once ediciones de estos galardones, SERES ha promovido las actuaciones sociales de las empresas y se ha convertido en un referente en el intercambio de buenas prácticas en esta materia. Como en las anteriores ediciones de los Premios SERES, el jurado está integrado por personas representativas de distintos ámbitos de la sociedad: entidades e instituciones relacionadas con la Responsabilidad Social Empresarial y la innovación social, ONG, medios de comunicación, universidades y escuelas de negocio, administraciones públicas y mundo político y sindical.
Francisco Román, presidente de la Fundación SERES, ha afirmado que “la crisis provocada por la COVID-19 pone encima de la mesa dos retos fundamentales para la sociedad y la empresa. En primer lugar, retomar la actividad económica y hacerlo sin dejar a nadie atrás. Y por otro lado, el segundo gran desafío será contar con líderes responsables, capaces de cambiar el paso, esquivar inercias y aplicar un equilibrio que combine la necesidad de resultados inmediatos con una visión a largo plazo guiada por el propósito. Este año hemos contado con alrededor de 90 candidaturas, que demuestran que es posible generar valor social que, a su vez, es una oportunidad para ofrecer resultados económicos y un impacto social positivo”.
Según Ana Sainz, directora general de la Fundación SERES “hemos comprobado cómo este movimiento de valor compartido entre sociedad y empresa, que llevamos defendiendo juntos durante algo más de una década, se hace siempre más necesario y crucial que nunca. Los cambios son oportunidades extraordinarias para las empresas para innovar y liderar con responsabilidad. Estos premios son un reconocimiento precisamente a ese compromiso y trabajo de las empresas para poner el foco en largo plazo sin descuidar el apoyo a las personas más vulnerables”.
CORREOS. Ayudar en todo lo que podamos
La crisis de la COVID-19 fue el momento decisivo para que las empresas pudiesen aportar soluciones que tuvieran un impacto positivo en la sociedad. Por ello surgió esta campaña que se enmarca en una de las líneas de su Plan de Sostenibilidad: Relación con la comunidad. Bajo esa premisa, la compañía centró su actividad en varias áreas.
Reparto de alimentos y bienes de primera necesidad:
Distribución de material sanitario y medicinas:
Lucha contra la desconexión educativa:
FUNDACIÓN MAPFRE – Juntos Somos Capaces
La tasa de inactividad de las personas con discapacidad intelectual en España es superior al 70% (INE 2017). De este colectivo más del 80% de las personas activas estaban en situación de desempleo según la encuesta EDADP de 2008.
Juntos Somos Capaces nace en 2010 con el objetivo de reducir la tasa de inactividad y desempleo de personas con discapacidad intelectual y enfermedad mental e integrar laboralmente en la empresa a personas con discapacidad intelectual y enfermedad mental. Desde entonces, la iniciativa ha diseñado un sistema de intermediación laboral en el que, además de sensibilizar a las empresas, desarrolla itinerarios laborales adecuados a las características de cada candidato en los que participan las propias entidades sociales. El proyecto se desarrolla en toda España y comprende las siguientes acciones:
Grupo Red Eléctrica- Alimentos solidarios
Proyecto que apuesta por proteger las pequeñas explotaciones agropecuarias dirigidas por mujeres, que se quedaron sin sus canales de comercialización durante el estado de alarma, comprando sus productos, para donárselos a instituciones y entidades sociales que asisten a familias y colectivos vulnerables y en riesgo de exclusión durante la pandemia. A través de esta iniciativa se han distribuido 135.000 raciones de alimentos frescos donados en 24 provincias de 13 comunidades autónomas.
Entidades colaboradoras: