La mayor encuesta de este tipo, con más de 20.000 participantes de 23 países, realizada por GlobeScan (una consultoría independiente especializada en estudios de mercado), revela que 6 de cada 10 consumidores de pescado (el 58%) ya habían cambiado el año pasado sus hábitos, en cuanto a elegir y comprar pescado, con la intención de proteger a los peces de nuestros mares.
El activismo de consumo contempla acciones como cambiar de marca, o de producto, por aquellas que dicen que ayudan a proteger los océanos, o a los peces (23%); adquirir especies de pescado diferentes (17%); e ir a comprar el pescado a otro establecimiento (15%). Ocho de cada diez consumidores (83%) están dispuestos a tomar más medidas en un futuro para proteger a nuestros océanos.