Esta es una de las conclusiones que arroja el último estudio realizado por Fundación Másfamilia, ‘Qué, cómo y cuánto se concilia en la empresa española’, junto con la Comisión Técnica de Salud, Bienestar y Conciliación de la Asociación Española de Directores de RR.HH. (AEDRH). Se trata del segundo informe sobre ‘Qué, cómo y cuánto se concilia en la empresa española’ que se realiza desde esta comisión. El primero se realizó en 2015.
Por un lado, en lo que respecta a lo que las organizaciones españolas realizan en conciliación, este informe revela que el 72% de las empresas que han participado en el estudio, cuentan con un modelo de gestión con objetivos asociados. Además, el 95% otorga flexibilidad de entrada y salida, el 76% ofrece flexibilidad a la hora de tomar vacaciones, el 95% permite reducir la jornada en caso de enfermedad y el 64% admite que sus líderes participan en el proceso. Resulta anecdótico que el 56% opine que se penaliza a las personas que usan la conciliación.
Por otro lado, en lo que respecta al cómo ponen en marcha la conciliación, se percibe una clara diferencia entre el qué y el cómo, donde hay más diversidad de repuesta y no queda claro el trabajo de gestión en conciliación. En este aspecto, el 36% dispone de un responsable de la gestión de la conciliación; mientras que el 23% ha desarrollado un perfil comercial, el 37% dispone de indicadores ad hoc, el 8% utiliza un modelo de gestión de la conciliación y el 22% realizan auditorías internas de conciliación como herramienta de seguimiento y medición.
Una de las conclusiones extraídas de este estudio es que existe una importante diferencia entre lo que se hace y cómo se hace. Las organizaciones sí que se encuentran interesadas en proporcionar conciliación a sus colaboradores, pero no tanto en la forma de gestionarla.
Por último, sobre el impacto que puede llegar a ejercer la conciliación dentro de la compañía, se debe destacar que para el 92% de las organizaciones participantes la conciliación es un atributo de buen empleador, mientras que el 78% consideran que es un elemento demandado por el candidato. En el ámbito del compromiso, casi la mitad de las empresas (44%) ha podido establecer formalmente, con datos, una econometría entre conciliación y compromiso y el 75% de los encuestados considera que la conciliación genera compromiso; y en lo que respecta a la Responsabilidad Social Empresarial (RSE), tan sólo la mitad de la muestra considera que la conciliación es un atributo de la RSE cuando en la totalidad de las iniciativas y corrientes de la RSE cuentan con la conciliación como una de las dimensiones claras a trabajar.
Sin embargo, es en el ámbito de la diversidad donde se producen los peores resultados en atención a la evolución 2015-2019. En igualdad de género se produce un empeoramiento generalizado con descensos especialmente relevantes en el estamento “mandos intermedios” con un descenso del 27% y, el de “dirección” con un 19%.
Según Roberto Martínez, director de Fundación Másfamilia, “no cabe duda en que hay que mejorar lo presente. Tenemos una necesidad para conciliar más y mejor. A medio y corto plazo, se debe incentivar, apoyar y animar a aquellas organizaciones que, de manera voluntaria, decidan echar una mano en esto de la conciliación, cubriendo en parte el rol del Estado en la materia. A largo plazo la cuestión cambia y la clave estaría en llevar estos temas a los colegios, educando en valores para que las futuras generaciones lo incorporen”.