Como explica Nathalie Gianese, directora de Estudios de Informa D&B: “La red del Pacto Mundial en nuestro país es la más amplia, con 1.455 firmantes, lo que muestra la importancia que ha cobrado la RSE en la sociedad española, pero, de momento, son principalmente las empresas de gran tamaño las que se suman a estas iniciativas”.
Las grandes compañías tienen una mayor representación en el Pacto que en el conjunto del tejido empresarial, son el 29% de los firmantes y el 0,9% del total mientras que las microempresas, aunque suponen el 30 % en el Pacto son el 95% del conjunto. Este mayor tamaño de las entidades adheridas hace que la actividad internacional esté más presente, 35%, en comparación con el 3% del total nacional.
Por su forma jurídica, el 80% de los firmantes son sociedades mercantiles (anónimas o limitadas) y los autónomos no llegan al 0,4%. Se dedican sobre todo a actividades de Servicios empresariales, 30%, Industria, 13%, Comercio, 9%, y Construcción y actividades inmobiliarias, 8%. Aquí hay que señalar que Comercio y Construcción tienen un peso mucho menor que el que alcanzan en el entramado empresarial, donde suponen el 23% y 26% respectivamente.
En el 74% de los casos, los asociados tienen un riesgo bajo o medio/bajo frente al 50% del total del universo empresarial. Como nota media, los integrantes del Pacto llegarían a un 12,46 mientras que la del conjunto se quedaría en un 10,71.
Aunque las empresas del Pacto cumplen en menor proporción con la Ley de Igualdad, que recomienda tener un 40% de mujeres en el Consejo de Administración. Entre los firmantes solo el 14% alcanza esta cifra, sin embargo, entre el total de compañías el porcentaje se eleva hasta el 25%.