‘Giving in Numbers’ es el informe de referencia desde hace casi 15 años en el análisis comparativo de las compañías multinacionales en el ámbito de inversión social corporativa. Conforme a sus conclusiones, BBVA se sitúa dentro del 25% de empresas socialmente más comprometidas, que en 2018 alcanzaron una inversión en la comunidad superior a 60 millones de dólares o 54 millones de euros (el 1,94% de los beneficios antes de impuestos). BBVA, que participa dentro de la categoría de entidades financieras (la más numerosa, con 67 miembros), suma once años aportando sus datos para la elaboración de este informe.
El informe de 2019 ha contado con la participación de 250 de las más importantes multinacionales de todo el mundo, que representan, en conjunto, unos ingresos de 7,9 billones de dólares (7,1 billones de euros) y 16,2 millones de empleos. La media de sus donaciones totales se situa en 20,7 millones de dólares, una cifra equivalente a 0,94% de los beneficios antes de impuestos que obtuvieron las empresas.
Entre las conclusiones, destaca el aumento de 11 puntos porcentuales de la inversión social en un periodo de dos años (2016-2018). Las aportaciones totales son la suma de tres tipos de inversión social: directas (la inversión corporativa en programas sociales procedentes de la sede central u oficinas regionales); aportaciones a fundaciones y organizaciones no gubernamentales; y contribuciones no monetarias (producto y servicios gratuitos estimados según el valor de mercado). Estas aportaciones tienen como foco principal los programas educativos con un 28% de la inversión total de las empresas. En 2018, BBVA invirtió más de 38 millones de euros en educación, en particular en los ámbitos de acceso a la educación, calidad educativa, desarrollo de competencias y educación financiera.
Por primera vez, los datos de esta edición revelan el número de horas anuales de voluntariado que las compañías ofrecen a sus empleados. Esta cifra en 2018 se situó en 20 horas de media anual y pone de relieve que las empresas incentivan cada vez más a sus empleados a contribuir solidariamente al bienestar de las comunidades. En 2018, los empleados de BBVA dedicaron 170.000 horas a actividades de voluntariado.
Entre las cuatro áreas estratégicas para la inversión social: asociaciones con el sector privado; medición y evaluación; valor compartido; y Objetivos de Desarrollo Sostenible fueron éstos últimos “los más influyentes en la estrategia de inversión social”, según revela el informe. El 51% de las empresas encuestadas reconocen que “incluyen en los informes a sus CEOS y consejeros ejecutivos información sobre los ODS”.
“Si bien los gobiernos son los principales impulsores para alcanzar (e informar) sobre los ODS, muchos grupos de interés parecen estar convencidos de que la consecución de estos objetivos no será posible sin una participación proactiva y efectiva del sector privado”, señala el informe.
Desde su adopción por la ONU y por 193 gobiernos que acordaron cumplir con estos 17 objetivos y 169 metas, los ODS han ganado fuerza como marco normativo de política entre muchos sectores y grupos interesados. De esta forma, han evolucionado desde una palabra de moda a convertirse en un marco para las conversaciones sobre sostenibilidad a nivel global.
