La compañía ha puesto en marcha una serie de iniciativas para ser cada día más sostenible, tanto en su Red Oficial de Concesionarios como en sus oficinas de Alcobendas (Madrid). En las instalaciones de concesionarios, los cambios implementados han permitido reducir el uso de agua en un 20% respecto a 2017, una disminución que alcanza el 29% de disminución en la cantidad de agua usada para los procesos de lavado de los vehículos. Además, durante el año 2018 se ha utilizado un 3% menos de papel respecto al año anterior.
Aparte de minimizar el consumo de estos bienes, Toyota también promueve el reciclaje y el correcto tratamiento de los residuos que la compañía genera de forma directa o indirecta. Destaca que el índice de reciclaje de las baterías de plomo ha alcanzado el 85% durante el año 2018.
De forma paralela, también se promoverán iniciativas para reducir el consumo de plásticos y fomentar el reciclaje en las oficinas centrales de Toyota en España. Asimismo, durante el mes de junio se llevará a cabo una campaña de comunicación interna, a través de diferentes canales, para concienciar a los trabajadores de la compañía sobre la importancia de minimizar el impacto medioambiental para cuidar y preservar el planeta.
La última semana del mes, los empleados podrán asistir a unas charlas en las que profundizar los conocimientos sobre los seis retos que componen el Desafío Medioambiental Toyota 2050 —Toyota Environmental Challenge 2050—: cero emisiones de CO2 en vehículos nuevo, cero emisiones de CO2 en el ciclo de vida, cero emisiones de CO2 en las fábricas, reducir al mínimo y optimizar el uso de agua, construir una sociedad y sistemas basados en el reciclaje y construir una sociedad futura en armonía con la naturaleza.