En este sentido, las grandes empresas de nuestro país están experimentando importantes avances. De hecho 19 empresas del IBEX 35, que suponen el 54% del total, ya cuentan con una política propia de derechos humanos. Un dato que todavía ofrece una proyección considerable, pero que da muestra de que la tendencia va al alza si se tiene en cuenta que en 2017 el número era de 14 empresas y en 2016, de 11. Así se extrae de un análisis realizado por la Red Española del Pacto Mundial a partir de las memorias de sostenibilidad de las compañías que componen este índice bursátil.
Otro de los factores que da muestra del creciente compromiso del sector privado con los derechos fundamentales se encuentra en el hecho de que 15 de las 35 empresas del IBEX35 reportan evaluaciones de sus impactos en temas de derechos humanos. En 2017 este dato se situaba en 12, mientras que en 2016 solo eran 8 las empresas que realizaban estos exámenes. No obstante, a pesar del avance, en la actualidad solo 10 corporaciones indican expresamente en su memoria de sostenibilidad estar llevando a cabo un proceso de debida diligencia para evaluar su desempeño. También aquí se observa una mejora -en 2017 eran 7; y en 2016, 4-, pero la brecha entre el examen y la sistematización de la identificación, prevención, mitigación y rendición de cuentas es considerable.
El estudio de la Red Española del Pacto Mundial va más allá y desglosa una serie de elementos que ayudan a trasladar el compromiso del ámbito empresarial con la aplicación y difusión de los derechos humanos a sus colaboradores. En este punto, destaca la implicación de la cadena suministro, un área sobre la que ya trabajan 23 empresas del IBEX 35 a través del control a sus proveedores. Una acción que adquiere una importancia capital, pues las grandes empresas actúan como prescriptores y referentes para otras más pequeñas. Aun así, sólo 12 de estas entidades informan sobre si se han identificado impactos como resultado de estas evaluaciones. En esta misma línea, la sensibilización interna es igualmente relevante, pero 19 de las 35 compañías analizadas (54,3%) no reflejan en sus memorias ningún tipo de formación en esta materia a su plantilla. Este indicador se mantiene respecto al pasado año, si bien experimenta un retroceso en relación con 2016, cuando se situaba en el 45%.
Por otro lado, la liquidez de las fronteras físicas está acelerando los procesos de internacionalización de muchas compañías. Una realidad que obliga a poner el foco en otro riesgo: la vulneración de los derechos de la población autóctona. Así, y aunque 28 de las 35 corporaciones del IBEX tienen actividades en países con pueblos indígenas, únicamente el 36% proporciona información acerca de su impacto sobre ellos.
A tenor de los datos, las grandes corporaciones de nuestro país están experimentando un avance considerable. Sin embargo, el margen de mejora es amplio. “Confiamos en que la próxima reactivación del Plan de Acción Nacional de Empresas y Derechos Humanos servirá para incentivar a más organizaciones a mejorar la gestión de los derechos humanos”, explica Cristina Sánchez, subdirectora de la Red Española del Pacto Mundial, al respecto.
Con la intención de que el tejido empresarial siga avanzando en su responsabilidad y reforzar el compromiso de los demás agentes sociales, la Red Española del Pacto Mundial ha querido dar visibilidad al 70 Aniversario de la Declaración de los Derechos Humanos con una serie de acciones especiales, entre las que destaca la difusión en redes sociales de gráficos que exponen la relación entre los ODS y los derechos humanos con el hashtag #DDHHyEmpresas. Se une así a otras iniciativas promovidas desde el ámbito internacional, como el sitio web impulsado por la Oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas para ofrecer un análisis detallado de cada uno de los 30 artículos que conforman el documento.
