27/07/2016 08:20:00

Un tercio de toda la producción de alimentos acaba en la basura

La demanda de fruta 'perfecta' está dañando al clima

Los desechos de comida es el componente más importante de los vertederos e incineradoras de Estados Unidos, de acuerdo con un informe de la Agencia de Protección del Medio Ambiente. Los estadounidenses tiran a la basura casi toda la comida que comen a causa de un "culto a la perfección", profundizando en el hambre y la pobreza y causando un efecto negativo sobre el medio ambiente.

Grandes cantidades de productos frescos cultivados en los EE.UU. se dejan en el campo hasta la putrefacción, sirven para la alimentación del ganado o van directamente desde el campo a los vertederos a causa de las normas cosméticas poco realistas e irreductibles, de acuerdo con los datos oficiales y entrevistas con los criadores, a los envasadores de decenas, camioneros, investigadores, activistas y funcionarios gubernamentales que ha recogido el diario The Guardian.

"Todo es a causa de los productos libres de imperfecciones" afirma Jay Johnson, encargado de los buques de frutas y hortalizas frescas procedentes de Carolina del Norte y el centro de Florida. Si no es perfecto “se rechaza”.

Unos 60 millones de toneladas de productos se desperdicia por los minoristas y los consumidores cada año, lo que supone un tercio de todos los productos alimenticios.

En más de dos docenas de entrevistas, los agricultores, empacadores, mayoristas, transportistas, académicos y defensores de alimentos describen que los desechos se producen cuando los vehículos abandonan los alimentos ‘con cicatrices’ para evitar el gasto derivado de la mano de obra involucrada en la recogida.

Los investigadores reconocen que todavía no hay contabilidad clara de las pérdidas de alimentos en los EE.UU., aunque el Instituto de Recursos Mundiales trabajan por un ajuste de cuentas más precisa.

A nivel mundial, alrededor de un tercio de los alimentos se desperdicia: 1,6 millones de toneladas de producción de un año, con un valor de alrededor de 1 billón de dólares. Unos alimentos que se apilan en contenedores metros cúbicos.

Cifras que han alentado al gobierno de Obama y a la ONU a que se comprometan a reducir a la mitad este desperdicio evitable para el 2030.

Los expertos en alimentos dicen, por su parte, que hay una creciente conciencia de que los gobiernos no pueden combatir con eficacia el hambre, o el cambio climático, sin reducir el desperdicio de alimentos, ya que suponen alrededor del 8% de la contaminación global del clima. Eso sin contar la pérdida de agua, la tierra y otros recursos, o el peaje en el clima de la producción de alimentos que terminan en los vertederos.

Compartir:
  • linkedin share button