En el ámbito medioambiental, el estudio destaca que un 84% de las empresas analizadas ha definido una estrategia de reducción o compensación de emisiones de gases de efecto invernadero y lucha contra el cambio climático. Por otro lado, aumentan respecto a 2013 a un 91% las compañías que realizan actividades para la preservación de la biodiversidad.
En cuanto a la implementación de sistemas de gestión integral de la ética, ha aumentado hasta un 77% el porcentaje de empresas que cuenta con este tipo de mecanismos.
En el apartado de compra responsable, el 79% de las empresas analizadas solo realiza compras a proveedores que cumplen los criterios exigidos de Responsabilidad Social Corporativa. Además el 64% de las compañías trasladan con carácter obligatorio los criterios específicos de RC a los proveedores con mayor riesgo sobre el negocio.
Finalmente, en materia de empleo juvenil, el estudio muestra que un 62% de empresas lleva a cabo iniciativas de empleabilidad para jóvenes, de los cuales un 25% realiza programas de Formación Profesional Dual.
Durante la presentación del estudio, el presidente ejecutivo de ISS Iberia y presidente del Estudio, Joaquim Borrás, ha resaltado que “la Responsabilidad Corporativa ya no es sólo una cuestión de imagen o de moda, sino que es sinónimo de competitividad y éxito para las empresas. A través de los resultados del estudio ha quedado comprobado que las empresas responsables reducen riesgos, reducen costes, aumentan su eficiencia, fortalecen su reputación y mejoran su competitividad. La Responsabilidad Corporativa busca cada vez más generar círculos virtuosos que provean de competitividad, eficiencia y sinergias al tejido empresarial y en esta misma línea veremos cómo la economía circular se irá desarrollando e imponiendo, transformando el modelo actual”.
Por su parte, el secretario general del Club de Excelencia en Sostenibilidad, Juan Alfaro, ha señalado que “este año podremos ver la hoja de ruta de la RC marcada por iniciativas que responden al nuevo contexto nacional e internacional”. En este sentido Alfaro ha destacado que desde la edición anterior de este estudio se han producido notables acontecimientos como la aprobación de la Directiva Europea de Información No-Financiera, la publicación del nuevo Código de Buen Gobierno de las Sociedades Cotizadas de la CNMV, la presentación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, o el Acuerdo contra el Cambio Climático derivado de la cumbre COP21 de París.
“Dichos acontecimientos están afectando sin duda a las estrategias, políticas y actuaciones en materia de RC de las grandes empresas en España. Por tanto, las tendencias y temáticas principales que se desarrollarán este año girarán en torno al cambio en el modelo de empleo, la integración de los Objetivos de Desarrollo Sostenible en las políticas de RC y estrategia de negocio; la gestión integral de riesgos; la inversión socialmente responsable; la aplicación, desarrollo y extensión de los Derechos Humanos en el ámbito empresarial; el cambio climático con la aplicación de los acuerdos de la COP21, la seguridad y salud en el entorno laboral, la economía circular, el reporte integrado; el Compliance y el gobierno corporativo”, ha comentado el secretario general del Club de Excelencia en Sostenibilidad.
Finalmente, el manager de Sostenibilidad y Calidad de Vodafone España y director del estudio, José Manuel Sedes, indicó que “en el estudio se hace referencia a las empresas líderes, que son aquellas que comparten el cumplimiento de una serie de requisitos en el desarrollo de la Responsabilidad Corporativa, y que habiendo conquistado este nivel de excelencia en su desempeño, representan un referente para su sector y para el resto de sectores”.
Entre los aspectos diferenciales de estas empresas líderes destacan: el alineamiento de la estrategia empresarial con las oportunidades y riesgos relacionados con la RC; la disponibilidad de sistemas integrales de riesgos financieros y no financieros, así como de gestión de la ética; la aplicación de un Cuadro de Mando Integral que sintetiza los indicadores de RC; la inclusión de la RC como criterio específico para la calificación y selección de proveedores; o la implantación de estrategias de reducción o compensación de emisiones de gases de efecto invernadero.
