A través de estas acciones los participantes han trabajado en el cuidado, conservación, restauración y adecuación de dos Reservas de la Biosfera, un Parque Nacional, diez Parques Naturales, 36 zonas de especial conservación de la Red Natura y 6 espacios regionales.
Se ha actuado para la mejora del hábitat del oso pardo (en peligro crítico de extinción), de hábitats de anfibios (sapo partero y corredor, rana ágil y salamandra rabilarga; catalogados como vulnerables) y del hábitat de la cigüeña negra (vulnerable). Cuarenta de estas acciones se centraron en la mejora de la red fluvial, en consonancia con la Estrategia Nacional de Restauración de Ríos.
Esta iniciativa ha contado también con el apoyo de los ayuntamientos e instituciones locales correspondientes, fomentando el cuidado de los espacios naturales cercanos donde se practica habitualmente deporte.
La “Jornada de voluntariado ambiental” nace de la voluntad de los empleados de invertir la totalidad del margen obtenido por la venta de papel de regalo y bolsas en 2014 en estas actividades medioambientales.