A través de la una web del servicio los padres pueden conocer y supervisar la actividad online de sus hijos, establecer límites de uso responsable, bloquear contenidos inapropiados o peligrosos, localizar el dispositivo del menor y restringir ciertas aplicaciones, por una suscripción mensual desde 1,5 euros. Asimismo, el sistema permite proteger todo tipo de dispositivos, establecer horarios de uso, tener un informe detallado con la actividad realizada en Internet o recibir alertas si el menor visita páginas inadecuadas.
El único requisito indispensable para su contratación es que el padre o tutor legal del menor sea titular de una línea de Movistar, no siendo necesario que los menores tengan línea con la compañía.
En los últimos años, se ha disparado el uso de Internet entre los niños: un 20% por parte de los niños de 4 años hasta un 90% en el caso de los adolescentes de 13 y el hogar es el principal lugar de acceso a Internet. En este sentido, según un estudio del Observatorio de la Seguridad de la Información de INTECO (actualmente INCIBE) un 5,9% de los chavales afirman haber sido víctima de ciberbullying, mientras que un 2,9% reconoce haber actuado como acosador.
Y según diferentes estudios, el 90% de los niños que sufren algún tipo de incidente en el mundo digital no trasladan sus problemas a su entorno familiar. El 61% de los padres no saben que su hijo contactó offline con desconocidos y el 56% de los padres no sabe que su hijo recibió mensajes con contenido sexual (sexting).
Movistar Protege es un servicio multiplataforma que nace fruto del acuerdo global alcanzado en diciembre de 2014 por Telefónica y Qustodio, compañía barcelonesa en soluciones de seguridad, por el que ambas entidades se comprometieron a ofrecer servicios a los clientes de Telefónica utilizando las herramientas de seguridad y control parental de Qustodio. España es el primer país en el que se materializa esta alianza.