"Es ridículo desperdiciar comida mientras la mitad de la población del mundo pasa hambre" afirma la cocinera Ditte Jensen. Por este motivo Rub & Stub elabora sus menús con la comida que ha sido descartada por la industria debido a la proximidad de las fechas de caducidad.
Con la financiación de la ONG danesa Retro y la ayuda de voluntarios la viabilidad del proyecto está garantizada. "Nos mantenemos gracias al trabajo de los voluntarios y nos financia una ONG que tiene tres proyectos en África, así que todos nuestros beneficios se destinan a estos proyectos en Sierra Leona", comenta, en declaraciones a la BBC, la cocinera Ditte Jensen.