Jesús Núñez, director de Responsabilidad Social Corporativa y Relaciones Laborales de Grupo Mahou-San Miguel, comenta en una entrevista a CompromisoRSE que están “muy orgullosos de estos reconocimientos”, que se deben en buena parte a una mayor comunicación de sus proyectos.
De los seis ejes en que se divide la estrategia de RSC de la compañía, destacan el empleo y la empleabilidad tanto de los empleados propios como de las personas que están en los entornos en los que opera el grupo. Núñez recuerda la certificación de Mahou-San Miguel como empresa familiarmente responsable y añade: “Además, nuestros porcentajes de empleo fijo siguen siendo muy altos y estamos mejorando la presencia de la mujer. En referencia a la inserción laboral de personas con discapacidad, el año pasado contratamos a 15 personas en fábricas y seguimos trabajando para mejorar nuestros porcentajes por encima del 2% que establece la Ley de Integración Social del Minusválido, la LISMI. En este punto también cabe destacar que generamos empleo a través de compras a Centros Especiales de Empleo”.
Colaboración con instituciones
Respecto al otro foco de atención, la empleabilidad de sectores con riesgo de exclusión social, Mahou-San Miguel mantiene acuerdos con Instituciones Penitenciarias y la Federación Española de Baloncesto. En el marco de esta colaboración, se han puesto en marcha dos proyectos. “Baloncesto sin Límites” promociona la salud a través del deporte entre la población. También se ha puesto en marcha el proyecto “Baloncesto La Salida”, en el que se dan cursos de capacitación como entrenadores de baloncesto a reclusos de tercer grado que pueden encontrar así un trabajo remunerado de forma rápida al salir de la cárcel.
La misma filosofía sigue el programa “Becas de Formación en Hostelería”, en el que la empresa trabaja con los ayuntamiento y escuelas de hostelería para que los alumnos hagan prácticas. Según Núñez, este proyecto: “Se diferencia de otros en el hecho que buscamos a personas con dificultades y no valoramos tanto otros factores como la edad”. Para ello, Núñez explica la necesaria relación con la Administración local: “Los ayuntamientos nos ofrecen un asesoramiento técnico muy importante puesto que ellos tienen un conocimiento local muy profundo y representan un grupo de interés muy importante para nosotros. Para el Ayuntamiento de Lleida, Málaga o Burgos una fábrica de Mahou o de San Miguel es muy importante y para nosotros representa un grupo de interés importante. Además esta relación con la Administración local genera una buena reputación, son unos buenos prescriptores y nos ayudan mucho en la relación con el Tercer Sector”.
Voluntariado corporativo
Otro aspecto de la RSC, el voluntariado corporativo, ha sido potenciado por Mahou-San Miguel desde hace un año. Un equipo de selección del departamento de Recursos Humanos fue a una cárcel para explicar a reclusos de tercer grado cómo se hace un curriculum o cómo prepararse y afrontar una entrevista de trabajo. Otras acciones de voluntariado son las Navidades Solidarias” de recogida y entrega de alimentos o “Futbol para Todos” dirigido a personas con discapacidad.
Por último, Jesús Núñez anuncia que la Fundación Mahou-San Miguel está preparada para empezar a trabajar con una “dotación fundacional muy importante”. “La Fundación trabajará bajo el lema de que seguimos pensando en las personas y todo lo que hacemos va a ser de corazón”, afirma Núñez.
