A través del tratamiento de ozonización, se genera una activación de la molécula diatómica, que consigue la eliminación de todo tipo de olores tras un incendio o inundación y un efecto esterilizante al eliminar microorganismos como bacterias, virus, hongos, etc. De la misma forma, se actúa en aquellas superficies en las que un aire contaminado pueda suponer un factor perjudicial, no solo para los procesos industriales, sino también para las personas.
Según señala Enrique Cortina, Director de Limpieza de Interactiva: “Nos preocupamos de la salubridad del agua que bebemos, sin embargo, en muchas ocasiones no nos preocupamos del aire que respiramos. Según estudios científicos el 70% de los cánceres son consecuencia del aire que respiramos, alrededor de 500 litros de aire a la hora. Todo esto puede originar trastornos respiratorios que pueden ser benignos, pero pueden pasar a ser crónicos y dar lugar a bajas laborales -y añade–“Nuestra empresa garantiza la purificación y esterilización de los ambientes contaminados y malsanos al aportar salubridad al aire de las instalaciones del cliente”.
Asimismo, en caso de incendio o inundación la actuación de mantenimiento está centrada en la revisión del estado de los elementos e instalaciones afectadas, sobre todo centrado en la instalación eléctrica.
Superfícies ignífugas
Finalmente, y como prevención, se recomienda el tratamiento de ignifugación para evitar riesgo de incendio sobre suelos o elementos textiles (básicamente alfombras y moquetas). Este método no comporta riesgos tóxicos y convierte las superficies textiles que son combustibles en incombustibles para garantizar la inalterabilidad de la fibra.
