Pero, pese a estos datos, solamente el 16% de las empresas españolas tiene algún protocolo para tratar la intimidación y el acoso. Asimismo, apenas el 14% de éstas realiza evaluaciones de estos problemas, pese a que la ley obliga a ello.
Tal y como recoge una información publicada hoy en Elpais.es, la Inspección de Trabajo interpuso en 2009 un total de 194 sanciones a empresas por infracciones relacionadas con esos riesgos. Según palabras de Concepción Pascual, directora del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo, este tipo de violencia laboral es `el riesgo del futuro´ y denuncia que hasta la fecha se ha evaluado `muy poco´.
El informe llevado a cabo por UGT ha detectado que el 11% de las empresas vive situaciones de violencia laboral o acoso sexual y que las mismas `tienen potencial para afectar la salud del trabajador´.
Aunque no hay empresa que se pueda librar, si se deja entrever que en los sectores relacionados con la sanidad, el trabajo social y la educación el acoso y la violencia laboral puede darse con mayor frecuencia. Además, advierten los expertos, hay factores que la fomentan, como la intensificación del trabajo, la precariedad y la mayor flexibilidad.