Por ahora se ha colocado un sólo depósito, en la instalación de MRW en Barcelona, pero está previsto que en pocas semanas se instalen más puntos de suministro en Madrid, Valencia, Sevilla y Zaragoza. Una de las ventajas de contar con los surtidores en la misma instalación es que se cumple aún más rápido con los plazos de entrega, pues mientras se cargan y descargan los vehículos también se les puede llenar el depósito. La otra ventaja es poder tener una red propia y suficiente de combustible sostenible para el uso de la flota, sin depender de la red nacional de estaciones de servicio con Autogas, que a día de hoy es incipiente y no cubre las necesidades de una empresa cuya flotas realiza 1.600.000 kilómetros a la semana.
No es casualidad que MRW quiera nutrirse de una flota sostenible impulsada con Autogas. El Gas Licuado de Petróleo es el combustible alternativo más usado del planeta. Además de ser fácil de conseguir, sus beneficios al medio ambiente son considerables: Reduce en un 96% las emisiones de NOx, gas causante de la lluvia ácida y prácticamente elimina la emisión de partículas contaminantes. También se reduce el C02 vertido a la atmósfera y por último se consigue evitar un 50% del ruido propio de un vehículo.
En palabras del Director General de MRW, Francisco Martín Villanueva, “MRW quiere contribuir en la mejora de la calidad de vida de las personas porque ese es precisamente uno de los objetivos fijados en nuestra estrategia de Responsabilidad Social. En su día fuimos pioneros tanto en nuestra apuesta por la acción social como en nuestras políticas de igualdad y conciliación laboral y, ahora vamos a ser también el referente en nuestro sector en cuanto a defensa del medio ambiente”.
