Hasta ahora la tendencia más seguida por las compañías ha sido ofrecer a sus trabajadores descuentos especiales en algunos gimnasios, con el fin de poder realizar deporte. Esta iniciativa no es del todo efectiva si no se acompaña el ejercicio de una dieta correcta, y por ello el siguiente paso tomado por muchas empresas ha sido el de ofrecer menús sanos y equilibrados en sus instalaciones.
Ejemplos de esta política son el fomentar el consumo de fruta, informar sobre las calorías de los alimentos que se ofrecen en los comedores o realizar campañas de información a los empleados sobre cómo comer bien, para que los mayores den ejemplo a sus hijos al llegar a casa.
Empresas como Schweppes, Kellogg’s, Abbott o Novartis han tomado sus propias medidas, variadas y ejemplares de cómo se puede ayudar en materia alimenticia. Schweppes patrocina el Programa Thao-Salud Infantil, para fomentar la buena alimentación y el deporte en los niños; Kellogg's ofrece cada día a sus empleados un desayuno a base de lácteos, fruta y cereales y fomenta la práctica de deportes como el fútbol o el pádel; Abbott fomenta el control cardiovascular de sus trabajadores Novartis informa sobre las calorías de sus alimentos de cantina.
