Comprometidos con el valor social de
nuestra manera de hacer banca
Severiano Solana
director de Estrategia y Seguimiento Sostenibilidad de CaixaBank
¿Qué iniciativas destacaría en materia de RSE y Sostenibilidad desarrolladas por su empresa en 2022?
Por su complejidad y su trascendencia
a futuro, me quedo con la publicación
de los objetivos intermedios de descarbonización a 2030 de nuestra cartera
crediticia, dentro de los objetivos para
2050. Priorizamos en dos sectores que
son responsables del 70% de las emisiones de CO2 globales: energía y petróleo y gas, con la reducción del 30% de la intensidad media y del 23% de las emisiones absolutas, respectivamente. De manera complementaria, para fortalecer la
transparencia en nuestros compromisos,
en octubre de 2022 publicamos nuestro
primer informe climático, que contiene
nuestra estrategia, la gestión de los riesgos y la identificación de oportunidades
y la metodología para establecer nuestros objetivos net zero.
Además, para este año tenemos previsto
anunciar otras cinco nuevas sendas de
descarbonización correspondientes a
cinco nuevos sectores.
¿Cuáles son los principales retos de futuro de su compañía?
En los últimos años la sostenibilidad ha
evolucionado de ser un ámbito basado
en buenas prácticas voluntarias a ser
compliance
un elemento más del de
nuestra actividad.
Por esto, además de tener como reto
nuestro compromiso con el valor social de nuestra manera de hacer banca,
para ofrecer soluciones a los grandes
desafíos globales como la desigualdad,
el cambio climático y el crecimiento
económico equitativo, otro desafío
que vemos en estos años inmediatos
es que seamos capaces de integrar en
nuestro modelo negocio el aluvión de
normativa y de requerimientos de supervisores que se están desarrollando
alrededor de los temas ASG.
Por ello es indispensable dar respuesta
a estos retos a través de la formación
de los equipos, transformar los sistemas
de datos, adaptar nuestros modelos
comerciales e integrar en los circuitos
de riesgos, factores ASG, con el objetivo de anticiparnos a los cambios que se
están produciendo.