OPINIÓN

De la Obligación a la Oportunidad: hacia el crecimiento Económico Medioambiental y Sostenible

Tom Wagland,

director de la División de Medio Ambiente de Ricoh Europe

Tom Wagland

Cada vez que nos fijamos en cómo la industria global afecta a la sostenibilidad, se hace más obligado equilibrar el cuidado del medio ambiente con nuestros objetivos financieros. Si bien hay una creciente conciencia de la estrecha relación entre sostenibilidad económica y medioambiental muchas empresas todavía tienen una actitud pasiva ante la gestión de este área. No es extraño que se centren en la legislación y normativa vigente y no pretendan ir más allá de estas normas mínimas.

Podemos enumerar multitud de razones de esta actitud pasiva: la naturaleza de su negocio, el tiempo que han estado involucradas, los recursos internos, la incapacidad de los procesos de cambio.... Estas empresas pasivas deben saber que todavía pueden ganar más, porqué cualquier esfuerzo por pequeño que sea se les retornará en beneficios a largo plazo para la compañía y el medio ambiente. Además de las obligaciones ecológicas, hay oportunidades que se pueden identificar al mismo tiempo con la conservación del medio y la rentabilidad, y que reportarán beneficios de sostenibilidad económica y ambiental a largo plazo. Reconocer la relación entre empleados, sociedad y medio es el punto de partida.

Una cultura empresarial que abarca esta visión y reconoce que sus acciones y empleados pueden influir en las vidas de millones de personas recorrerá un camino más transparente para lograr la conservación del medio ambiente y el éxito rentable de forma simultánea.

Kiyoshi Ichimura, fundador de Ricoh, adoptó una filosofía de empresa que ya reflejaba estos valores en 1936, y la llamó "el espíritu de los tres amores". Si cada empleado desarrolla el amor y el respeto por sí mismos comenzarán a amar y apreciar a los demás y al mundo que les rodea. El concepto es similar a lo que hoy llamamos la RSC y ha contribuido al establecimiento de Ricoh como pionera en Green IT, gestión empresarial sostenible, así como líder en la innovación orientada al cliente.

Una estrategia del modelo de carbono

La evolución de la Responsabilidad Social de Ricoh sirve como guía útil para aquellas compañías que se encuentran en una de las tres etapas clave de la sostenibilidad de las empresas:

• Pasivo – cumplir la legislación y normativa vigente
• Proactivo – superar las regulaciones ambientales
• Responsable – combinar las preocupaciones ecológicas con las mejores estrategias de negocio

El esfuerzo por ser sostenible comienza cuando existe una filosofía empresarial que reconoce la relación en red de empleados, empresa y medio ambiente.

Etapa pasiva: centrarse en el cumplimiento

Cuando la conciencia ambiental encontró su espacio en la agenda corporativa de los años 70, la contaminación se convirtió en una cuestión clave y empezó el esfuerzo por reducir el impacto ambiental y las emisiones de CO2. Reconociendo la importancia de la prevención de la contaminación, Ricoh estableció su primera oficina de promoción ambiental para examinar objetivos básicos como la eliminación de los CFC, así como el desarrollo de productos eco-responsables. También se centró en áreas como el diseño y la fabricación de productos, reconocidas como las que mayor impacto ambiental, consumo de recursos y emisiones de CO2.

Los esfuerzos para cumplir con las regulaciones son el primero de los tres pasos hacia la conservación del medio ambiente y la gestión sostenible. Es en la etapa pasiva; la empresa cumple con los requisitos ambientales, pero todavía no promueve activamente el cambio.

En esta etapa las empresas se centran en hacer un impacto ambiental positivo, pero no han descubierto la posibilidad de mejorar la rentabilidad –elemento de cambio en cualquier ecosistema de negocios–.

Etapa proactiva: superar los estándares

Las empresas aceptan voluntariamente su condición de ciudadanos del mundo y establecen objetivos para mejorar el desempeño ambiental incorporando prácticas verdes al negocio, tales como el I+D.

Para Ricoh esta segunda etapa se inició en la década de 1990 cuando se llevaron a cabo una serie de medidas proactivas para ir más allá de las normativas y legislaciones vigentes. Un diferenciador clave respecto a las actividades anteriores fue la participación de todo el personal para reducir la carga ambiental de Ricoh y compartir una visión común en consonancia con los objetivos de negocio de la empresa. En este punto se estableció que todas las actividades de medio ambiente tenían que cumplir dos criterios fundamentales:

• Deben generar beneficios adicionales para el grupo.
• Deben contribuir a la calidad de la empresa.

Durante este período Ricoh publicó su "círculo cometa" La representación gráfica define los participantes y las acciones de una sociedad sostenible, y las huellas a los procesos de negocio que tienen el mayor impacto sobre el medio ambiente.

Etapa responsable: entorno y rentabilidad

Desde el 2000 Ricoh ha combinado las preocupaciones ecológicas con las mejores estrategias de empresa para impulsar al mismo tiempo la conservación del medio ambiente y la rentabilidad. Los logros han sido:

• Introducir el "sistema de equilibrio ecológico" Ricoh para medir y reducir el impacto ambiental en todo el ciclo de vida del producto.
• El establecimiento de objetivos para que cada oficina de Ricoh lograra la acreditación ISO 14001 y todas las fábricas generen "cero residuos a los vertederos".
• La divulgación de la contabilidad ambiental de la empresa. El grupo introdujo un informe empresarial de contabilidad de medio ambiente en el que cada operación global proporcionaría información financiera dos veces al año, para las actividades ambientales. Esta representa una herramienta clave para lograr los objetivos de gestión financiera sostenible.

Con estos resultados en la mano, ¿Qué se consigue con la alineación de las preocupaciones ecológicas y la estrategia de negocio? El impacto es impresionante: al reducir el impacto ambiental de Ricoh y sus productos se generó un beneficio combinado de 1.266 billones de dólares entre 2000-2008, y Ricoh ha reducido su huella de carbono en 45.000 toneladas desde 2007.

El futuro

Como empresa ecológicamente responsable, ¿Qué debe tenerse en cuenta para el futuro, y cómo puede apoyarse la necesidad para seguir siendo rentable? Los dos últimos años han sido muy difíciles para la mayoría de las organizaciones, pero las empresas con un pedigrí medioambiental están en mejores condiciones para sobrevivir no sólo a la peor de la recesión, sino salir de ella más fortalecida. ¿Estáis preparados?