ENTREVISTA

El carácter industrial y exportador de la empresa vasca le hace ir por delante en sostenibilidad


Jesús Murga,

presidente de IZAITE Asociación de Empresas Vascas por la Sostenibilidad

Jesús Murga 27/10/2011

Hace seis años un grupo de empresas vascas sintieron la necesidad de crear una asociación que diera voz a sus estrategias e intereses en materia de sostenibilidad. Así nació IZAITE, que agrupa a empresas vascas como Iberdrola, BBK, Fagor, ITP o Eroski.

Hay quien aboga por asumir el término ‘sostenibilidad’ para referirse a todas las políticas de RSE de una empresa, más allá de su significado medioambiental con el que parece asociársele habitualmente, ¿qué opina?

Creo que la RSE o la Sostenibilidad es un concepto muy amplio, en el que hay que integrar el conjunto de actuaciones que hace cada organización con sus grupos de interés que habitualmente están relacionados con la economía, el medio ambiente y la sociedad, por tanto claramente, desde mi punto de vista y el de la Asociación a la que represento, el término de Sostenibilidad va mucho más allá del alcance puramente ambiental.

Hay que contemplar el aspecto medio ambiental, pero además hay que tener muy en cuenta la excelencia en la gestión económica de la organización y sobre todo, cada vez más, cómo se interactúa con los grupos de interés de la sociedad.

¿Qué relaciones mantienen con otras instituciones de ámbito español en materia de RSE como Forética o el Club de Excelencia en Sostenibilidad?

En IZAITE estamos convencidos de que la colaboración entre entidades que tenemos más o menos objetivos comunes multiplica el resultado del esfuerzo, por eso colaboramos con otras entidades e instituciones como Forética o el Club de Excelencia en Sostenibilidad o el Pacto Mundial, fundamentalmente en aspectos de divulgación en la organización de jornadas y también en la participación de nuestros miembros en sus actos.

¿Cómo valora la voluntad y las acciones de sostenibilidad desarrolladas por las empresas vascas en relación a las del resto de España? ¿Y con el resto de países?

Creo que el hecho de que el tejido empresarial vasco cuente con una significativa presencia de empresas industriales y expor tadoras, donde Europa ha sido su tradicional primer mercado y que tienen, en general, una mayor base tecnológica que la media del resto de España, ha hecho que la sostenibilidad se haya introducido en su gestión con un cierto adelanto sobre la media del conjunto de empresas del Estado, si bien es cierto que hay empresas en la zona centro, en Andalucía, Cataluña, etc. que están también muy avanzadas en RSE.

Yo diría que estamos en el furgón de cabeza de la sostenibilidad. En relación con el exterior, hay países europeos como Reino Unido, Alemania, los Países Nórdicos, etc. que claramente nos llevan ventaja y ellos deben ser nuestro referente para avanzar y traccionar a las empresas vascas.

¿Cuál es su opinión acerca de cómo debería ser el reporting de la RSE en todo tipo de empresas?

Informar es uno de los aspectos de RSE, que pretende poner a disposición de los grupos de interés y la sociedad civil los resultados y las actuaciones que hace la empresa en este tema. Por lo tanto, es un acto de valentía, que implica un compromiso ante esos grupos de interés, y ello hay que hacerlo con transparencia.

Hay muchos referenciales y normas sobre Responsabilidad Social, y creo que es bueno que haya una cierta estandarización de la información que se debe reportar para ganar compatibilidad y en ese sentido creo que el GRI es todo un acierto, como referente mundial, sobre reporting de RSE y además es progresivo, con sus tres niveles A, B y C plus o no plus. De hecho las empresas miembros de IZAITE que hacemos memorias de sostenibilidad todas utilizamos el GRI.

¿Qué opina acerca de que se implante la obligatoriedad de reportar sobre estos temas a determinadas empresas?

Sobre la obligatoriedad y la regulación para implantar la Responsabilidad Social Empresarial lo que hay que hacer es crear las condiciones para que las empresas de motu propio den el paso por convencimiento, no por imposición. Hay que sensibilizar, animar y ayudar a que esto se haga, pero estoy en contra de que la sostenibilidad se tenga que implantar por decreto. Si lo hacemos así, implantaremos unos sistemas artificiales que no estarán integrados en el ADN de las empresas y que a la larga terminarán desmoronándose, desacreditando la gestión responsable; por tanto RSE sí, pero de forma consciente y voluntaria.

¿Cuáles son los próximos retos en materia de RSE en el País Vasco?

En un mundo global, los retos en el País Vasco son los mismos que en cualquier región del mundo desarrollado, que podrían resumirse en integrar los aspectos social y medioambiental en la estrategia y planes de negocio de las organizaciones, gestionando de manera real y eficiente la triple cuenta de resultados (económica, social y medioambiental).

¿Cuáles son las principales dificultades con que se encuentran las empresas para aplicar criterios de RSE en su día a día?

Si esta pregunta me la hacen hace poco más de tres años, hubiera contestado de una forma, y ahora la respuesta es otra.

Una dificultad que existía entonces y que ahora persiste, es la gran disparidad de metodologías que hay en clave de RSE que dificultan, sobre todo a las pymes, llevar a cabo las actuaciones que mejor encajen con sus grupos de interés. Salvo en el caso del reporting, no hay una hoja de ruta suficientemente clara.

Si hablamos de estos momentos de crisis, un contexto que está haciendo pasar grandes dificultades a las empresas en el que el día a día y llegar a fin de mes es absolutamente prioritario para su supervivencia, la situación ha hecho que muchas empresas se replanteen su planes de desarrollo de todo tipo, entre ellos también los relativos a la RSE y retrasen sus actuaciones esperando que lleguen mejores tiempos.

Sin embargo, soy optimista: creo que la RSE saldrá reforzada de la crisis porque las empresas seguirán manteniendo actuaciones de RSE y confío que cuando vuelva la bonanza habrá una expansión importante.

Yo soy un convencido de que la RSE ha venido para quedarse en la gestión de las organizaciones.

La Ley de Economía Sostenible permitirá al Ministerio emitir certificados de ‘Empresas Responsables’, ¿qué opina?

Creo que es un intento loable de la Administración de impulsar el desarrollo sostenible, aunque requiere mucho desarrollo y en concreto en lo que se refiere a certificar empresas responsables, debemos ser muy cautelosos, ya que tenemos exceso de certificaciones. Certificamos todo tipo de sistemas, cer tificamos la ética, cer tificamos aspectos intangibles y lo que, en principio, pueda parecer un valor quizás, si no tenemos unos criterios suficientemente objetivos, lo que estemos certificando no sea lo más adecuado y en definitiva hagamos un flaco favor al desarrollo de la RSE.

¿Qué es, en su opinión, una empresa responsable?

Una empresa responsable es sensible a sus grupos de interés y a la hora de plantear su estrategia tiene integradas sus necesidades y expectativas dentro de la misma, sus planes de actuación cubren los distintos aspectos de la Responsabilidad Social, su cuadro de mando evalúa la efectividad de esas actuaciones y de forma equilibra gestiona los intereses, a veces no coincidentes o incluso contrapuestos, de los accionistas, las personas que trabajan, la sociedad en la que realiza su actividad, su cadena de suministro, etc. Ésa es una empresa responsable. Además debe tener una visión a largo plazo; planteamientos corto placistas no encajan bien en la sostenibilidad.

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