ENTREVISTA

“La educación financiera debería empezar en la escuela”


Annamaria Lusardi,

fundadora de Global Financial Literacy Excellence Center (GFLEC)

Annamaria Lusardi 01/07/2015

En un test realizado por el GFLEC en colaboración con el Tesoro de Estados Unidos en 13 países de la OCDE se demostró que menos de la mitad de los encuestados de países desarrollados conocían la respuesta a tres cuestiones básicas sobre temas financieros. ¿Por qué cree que esto es así?
Efectivamente, descubrimos que en estos 13 países, entre los que se encuentran algunos con mercados financieros muy desarrollados, la mitad de la gente no sabía nada sobre tres conceptos básicos: tipo de interés, inflación y diversificación del riesgo. El motivo fundamental es que en las escuelas no hay interés por la educación económica. Sin embargo, las personas no adquirimos conocimientos financieros simplemente observando nuestro entorno, de la misma manera que no aprendemos matemáticas mirando a nuestro alrededor. Así que no es sorprendente que la gente no tenga estos conocimientos.


¿Por qué es tan importante que los ciudadanos tengan una buena educación financiera?
Es impor tante porque en la actualidad todos tenemos que tomar muchas decisiones relacionadas con la seguridad económica. Pensiones, hipotecas, tarjetas de crédito, la compra de un coche, de una casa… y, más que nunca, también debemos invertir en educación.


Nuestra investigación demuestra que el conocimiento sobre economía en los países desarrollados es muy poco para el mundo en el que vivimos y, por lo tanto, es necesario establecer programas de educación financiera, empezando por la escuela. Yo siempre digo, y realmente lo pienso, que la educación financiera es, hoy en día, el equivalente a leer y escribir.

¿Cree que será más importante en el futuro de lo que lo ha sido en el pasado?
Por supuesto. Nos movemos hacia un mundo en que prevalece la responsabilidad individual, debido, principalmente, a cambios demográficos. Todos vivimos más años y las instituciones actuales no son capaces de apoyarnos de la misma manera que lo hicieron en el pasado. Imaginemos el reto al que se enfrentan las generaciones más jóvenes. Ellos vivirán diez años más que nosotros y deberán tomar muchas decisiones financieras en mercados financieros aún más avanzados que los actuales. Por eso, tener  conocimientos financieros es importante ahora, pero lo será aún más en el futuro.


¿Cuáles son las nociones básicas sobre finanzas que es importante que conozca un ciudadano?
Los tres conceptos básicos que todos deberíamos entender son el interés compuesto, la inflación y la diversificación del riesgo. El primero nos permite entender cómo transferir recursos en el tiempo y el coste de hacerlo. Por eso también es importante saber cómo funciona la inflación. En finanzas, además, miramos mucho hacia el futuro y el futuro es incierto. Por eso debemos entender el riesgo, un concepto con el que están relacionadas muchas de las decisiones económicas.


¿Cuáles son los colectivos que están más necesitados de educación financiera?
Para empezar, los jóvenes, porque son los que menos saben y son los que se enfrentan a las decisiones financieras más importantes ahora, como la inversión en su educación. Además, normalmente empezamos nuestra vida económica endeudados con préstamos diversos y es fácil tener problemas si no tienes claros los conceptos mencionados.

Otro grupo son los mayores, porque son quienes tienen el dinero y están en un momento importante en el que si cometen errores, será mucho más difícil subsanarlos. Lo curioso es que en nuestro estudio hemos observado que, aunque los mayores saben muy poco –casi tan poco como los jóvenes– creen que saben mucho. Eso los convierte en otro grupo muy vulnerable.

Y el tercer grupo son las mujeres. En todos los países que hemos cubierto las mujeres saben menos de finanzas que los hombres. Pero lo curioso es cómo responden a nuestras preguntas, ya que ellas dicen “no lo sé”. Ellas, pues, reconocen que no tienen conocimientos financieros y eso las hace únicas, porque no sólo no saben, sino que saben que no saben y eso hará que quieran aprender más que cualquiera de los otros dos colectivos.


¿Cuál cree que debe ser el papel de las instituciones financieras en lo que se refiere a la educación financiera?
Su papel es esencial porque son las que ofrecen los productos financieros. Pero, aunque está bien que estas instituciones ofrezcan formación, creo que su papel fundamental es promover la educación financiera y realizar actividades que ayuden a la gente a entender la economía. Desde mi punto de vista, lo mejor que pueden hacer es promover la educación financiera en las escuelas, la formación de los profesores y la educación en la comunidad.

Además, a las entidades financieras les iría mejor si sus clientes tuvieran conocimientos financieros porque así entenderían mejor sus productos. 

¿Cree que impartir o promover la educación financiera forma parte de la Responsabilidad Corporativa de las entidades financieras?
Sí que lo es. Las instituciones financieras viven en comunidad y es importante entender lo que esta comunidad necesita. Aunque mi recomendación es que todo el mundo sea un embajador de la educación financiera, que la pidamos en nuestras escuelas, que pidamos a las empresas que apoyen con materiales, con la formación del profesorado, etc. No necesitamos grandes iniciativas, podemos empezar por la escuela e ir construyendo. Y así, al menos, lograremos formar a los jóvenes, que son el grupo más vulnerable en este nuevo mundo económico.

  Enviar entrevista






CAPTCHA Image