Estas tareas ayudarán a los científicos a evaluar las respuestas de los osos polares ante el cambio climático y a descubrir si existen lugares donde estos puedan refugiarse en el futuro, tras haberse publicado un informe según el cual la zona quedará totalmente libre de hielo en el mar durante el verano en el año 2050.0
Los miembros de la expedición utilizaran equipos profesionales donados por Canon para registrar en imágenes la experiencia y todo cuanto ocurra durante el viaje. Además, Brutus Östling, fotógrafo sueco especializado en fauna salvaje y naturaleza, acompañará al grupo de científicos para captar instantáneas de la fauna salvaje que se encuentren durante su estancia en la zona, así como para documentar la expedición.
“Canon lleva colaborando con WWF durante mucho tiempo, apoyando varias expediciones al Ártico importantes y ayudando a la organización a recopilar datos sobre la situación medioambiental”, afirma Cyprian da Costa, Director de Comunicaciones de Marca, Canon Europe. “Las imágenes captadas en las islas Svalbard jugarán un papel fundamental en las investigaciones de la expedición y ayudarán a promocionar y difundir el importantísimo trabajo que realiza WWF para aumentar el interés y el conocimiento de los retos a los que se enfrentan los osos polares en un mundo cada vez más afectado por el cambio climático”, concluye.
Geoff York, director del programa de conservación de osos polares en WWF International, señala: “El apoyo de Canon en estas expediciones es de un valor incalculable. Nos sentimos muy satisfechos de poder trabajar conjuntamente con la compañía para mostrar los cambios que experimentan las condiciones del hielo y su impacto en las poblaciones de osos polares y su alimentación. Tanto las fotografías como los vídeos realizados mostrarán claramente nuestro trabajo y nos ayudarán a mostrar esos cambios a nuestra audiencia en todo el mundo”.
Con este apoyo a la expedición en las islas Svalbard, Canon suma ya tres patrocinios a viajes de investigación al Ártico. En 2012, se realizó un viaje desde Groenlandia al Área del Último Hielo en el Ártico Alto de Canadá, con el objetivo de valorar las opciones de gestión de dicha zona a futuro y, en 2013, se visitó la península de Taimyr, en el mar de Laptev, para recoger material genético que confirmara la teoría sobre la existencia de subespecies de morsas únicas en el Laptev.
