El riesgo que supone la polución de las ciudades chinas hace que Panasonic pague más a sus empleados desplazados. Así lo ha confirmado la multinacional, asegura que proporcionará una prima salarial para compensarles por los efectos de la creciente crisis de contaminación del país. Aunque la empresa no ha revelado la cantidad económica de la que se trata, ni tampoco el número de personas a las que les corresponde este aumento de sueldo. El gigante de la electrónica ha expresado que la amenaza para la salud que plantea el PM 2,5 partículas ha hecho que se llevara a cabo una revisión especial para el personal enviado a las ciudades chinas, publica businessGreen.
Esta medida puede provocar una reacción en cadena, ya que aumentará la presión sobre otras multinacionales a compensar de manera similar los ejecutivos que trabajan en el país. "El pago tiene sentido dado el nivel peligrosamente alto de contaminación en algunas ciudades urbanas como Beijing y Shanghai. Otras multinacionales han compensado a sus empleados por un montón de problemas, pero no han marcado explícitamente como indemnización por la contaminación. A menudo justifican como ajuste para variaciones relacionadas con los riesgos de salud y seguridad en el trabajo. Pero, ¿ha abierto Panasonic la caja de Pandora?” argumenta dice Kamel Mellahi, profesor de Warwick Business School, asegura que la medida crea precedente.
La economía China podría resentirse, la contaminación de los centros urbanos afecta a su capacidad para atraer y retener a los altos. El gobierno ha puesto en marcha una serie de iniciativas en los últimos años para tratar de frenar la contaminación del aire y en la actualidad está trabajando en un fortalecimiento de la ley ambiental del país , lo que daría a las autoridades más poder para cerrar instalaciones contaminantes e imponer multas elevadas en las empresas que violan ciertas reglas de contaminación del aire. Un importante programa de inversiones también se ha puesto en marcha para hacer frente a la contaminación del aire y el agua, después ministro Li Keqiang ha declarado recientemente "guerra contra la contaminación".
Sin embargo, los esfuerzos para reducir las emisiones están aún por tener un efecto apreciable, con nuevas cifras dadas a conocer el fin de semana muestra que sólo tres de 74 ciudades evaluadas cumplen las normas de calidad del aire del gobierno el año pasado.
