Según informa Europa Press, este teatro fue uno de los primero de Europa en adoptar un sistema de Gestión Ambiental, que se basa en tres principios: gestionar los recursos energéticos y el agua, el tratamiento de los residuos generales y la producción y destrucción de la escenografía según criterios ecológicos, como por ejemplo la reutilización.
El Liceo de barcelona, además, ha obtenido distintos premios como el EMAS Cataluña, la Mención de Honor de los Premios Nacionales de Energía (EnegAen) y el Premio del Instituto Catalán de Energía (Icaen).