“Lilly tiene una larga tradición en innovación y solidaridad”, ha dicho John C. Lechliter, presidente del Consejo de Administración, presidente y consejero delegado de Lilly. “Nuestro excepcional programa “Conectando Corazones en el extranjero” combina estás dos pasiones. Estamos apostando por nuevos enfoques para ayudar a los demás. Al mismo tiempo, estamos facilitando a nuestros empleados experiencias que les cambiarán la vida y les abrirán los ojos, convitiéndolos en ciudadanos del mundo más apasionados e informados. Es una inversión en las comunidades en desarrollo, en nuestros empleados y en el futuro de Lilly”.
200 empleados de 38 países han sido seleccionados para participar en el programa “Conectando Corazones en el extranjero” para 2011. Estos Embajadores ayudarán en comunidades en desarrollo de Asia, África y América del Sur y Central. No se requieren habilidades especiales (por ejemplo, conocimientos médicos), sólo pasión para marcar la diferencia. Los Embajadores de Lilly, con varios niveles de pericia y experiencia, trabajarán juntos para crear conexiones con las personas y comunidades que se enfrentan a difíciles desafíos en temas de salud y mucho más.
Los Embajadores compartirán sus experiencias con los 38.000 empleados de Lilly durante el tiempo que estén en las misiones y cuando vuelvan, a través de blogs internos y otros canales de comunicación. El objetivo es iniciar conversaciones e involucrar a toda la organización en las experiencias de los Embajadores para conseguir despertar nuevas ideas sobre cómo Lilly puede satisfacer las necesidades de las personas, ahora y en el futuro.
Más de 1.800 empleados de Lilly de 52 paíes se apuntaron al programa “Conectando corazones con el extranejero”; y 200 de ellos fueron seleccionados en febrero para el año inaugural del programa. Cada misión contará con 8 ó 9 empleados con diferentes funciones a nivel mundial, incluyendo técnicos de laboratorio, asistentes de marketing y especialstas en fabricación. Los Embajadores son empleados de dirección, trabajadores por horas y asalariados no directivos.
“Conectando Corazones en el extranjero” es otro paso hacia la visión de Lilly de mejorar la salud a nivel mundial en el siglo XXI, ha dicho Lechleiter.
Soluciones interculturales
Lilly ha llegado a un acuerdo con Soluciones Interculturales (CCS), una organización internacional sin ánimo de lucro que organiza programas de voluntariado de corta estancia en 12 países. CSS está reconocida como líder en el campo del voluntariado internacional, con un historial importante de apoyo a voluntarios en países en desarrollo, creando exerienciass professsionales seguras y cruciales.
“CCS y Lilly tienen sorprendentemente los mismos objetivos- ayudar y mejorar vidas”, ha comentado Steven C. Rosenthal, fundador y director ejecutivo de CCS. “El compormiso de Lilly de enviar 200 empleados en misiones de voluntariado es atrevido y sin precedentes. Representa el mayor acuerdo conrporativo hasta la fecha de CCS y el mayor lanzamiento de un programa de voluntariado para empleados a escala internacional. A través de los programas de voluntariado de CCS, los empleados de Lilly ayudarán y tendrán una de las experiencias más memorables de su vida”
Responsabilidad Corporativa de Lilly
Lilly está cambiando el foco de su responsabilidad corporativa y cada vez concentrará más recursos en áreas dónde las necesidades de la sociedad se cruzan con las áreas de conocimiento de la empresa, enfocándose a un concepto conocido con “valor compartido”.
La principal area de Lilly será mejorar la salud de las personas en situación de necesidad alrededor del mundo, especialmente la de las personas de países en vías de desarrollo que carecen de recuross para tener una sanidad de calidad.
“Conectando Corazones en el extranjero” tiene el potencial para jugar un papel importate en estos esfuerzos. “Sabemos que nuestras mejores soluciones para enfrenter los desafíos en salud vendrán de ideas innovadoras generadas por nuestros empleados”, ha dicho Robert. L. Smith, director senior de responsabilidad corporativa y presidente de la Fundación Lilly. “Para fomentar este tipo de innovación, queremos exponer a los empleados a diferentes culturas y ambientes. Cambiando nuestro marco de referencia, incrementamos la probabilidad de generar ideas”
Además, Smith añadió: “Como otras muchas compañías, históricamente, Lilly ha visto la responsabilidad corporativa más como un compromiso financiero. Esto está cambiando, y para mejor. Mientras las activiadades tradicionales de RSC, como la filantropía, tienen un papel, solas no pueden generar las soluciones a largo plazo requeridas para tratar los problemas más desafiantes. Sebemos que podemos tener un mayor impacto si concentramos nuestros esfuerzos y habilidades en crear un valor compartido para la sociedad y para Lilly”.
Más allá del primer foco en salud, la compañía está invirtiendo en esfuerzos para mejorar la educación pública en Estados Unidos, específicamente el K-12 del estado de Indiana. Lilly además apoya a las personas y a las comunidades locales a través del United Way y otros esfuerzos similares, y está comprometido con una buena gestión del medio ambiente.
