La obtención por parte de este edifico del certificado LEED no es una casualidad, pues la sostenibilidad y la eficiencia energética aparecen en el más mínimo detalle. La fachada cuenta con una doble piel que actúa de toldo solar permanente, y las maderas utilizadas para el mobiliario y la carpintería cuenta con el certificado de madera sostenible FSC.
Incluso su orientación está pensada para optimizar la luz natural en el interior del edificio mediante conductos solares y captadores de fibra óptica, y para la iluminación artificial cuenta con lámparas de bajo consumo y más de 500 dispositivos Led.
Otro apartado cuidado al máximo ha sido el del uso de energías renovables. La sede dispone de placas solares térmicas que proporcionan el 70% del agua caliente, y placas fotovoltaicas para la electricidad. Para ahorrar agua, el edificio aprovecha la totalidad de las aguas grises y pluviales para servicios y riego, y en la flora del jardín se han empleado especies autóctonas, cuyo consumo de agua es menor, lo que permite ahorrar hasta un 40% del líquido elemento.
La colaboración es importante
Coca-Cola España ha agradecido a todos los implicados en la construcción de la sede su esfuerzo por conseguir el certificado LEED. En palabras del presidente de Coca-Cola España, Marcos de Quinto: "Conseguir la certificación LEED Oro es un reconocimiento al trabajo de muchos años y muchas personas que han colaborado para que esta sede fuera un ejemplo del compromiso medioambiental de esta compañía".
De Quinto también ha tenido palabras de agradecimiento a otras entidades: "No hubiéramos logrado este reconocimiento sin la colaboración de un socio tan ejemplar como WWF y el excelente trabajo del estudio de arquitectura De la Puerta + Asensio".