El plan, que entró en vigor tras la firma y aspira a implantarse en un periodo máximo de cuatro años, desarrolla los principios de la Ley de Igualdad de 2007 y actualiza el acuerdo para la igualdad que aprobó el banco en 2005.
De acuerdo a su objetivo de impulsar el desarrollo profesional y la igualdad de oportunidades, el pacto aspira a ampliar la presencia de mujeres en puestos de dirección como los de directores provinciales, directores de departamento y directores de oficinas de determinado tamaño, entre otros.
Concretamente, banco y sindicatos se han marcado como objetivo que al término de los cuatro años de vigencia del acuerdo se produzca una reducción de cinco puntos porcentuales en el diferencial de género del 50% existente en los niveles salariales comprendidos del 1 al 5.
Del total de 26.000 empleados con que cuenta BBVA, 7.300 son trabajadores de alta y mediana dirección (niveles salariales del 1 al 5) de los que el 75% son hombres y 25% mujeres. Cumplir el objetivo significaría acortar la brecha entre géneros y situar la proporción de mujeres en el 30%.