23/04/2010 08:35:40

Los envíos de MRW viajan en sobres biodegradables

No contienen residuos tóxicos y su impacto ambiental es nulo

Las franquicias de MRW mueven anualmente más de 11 millones de sobres, cantidad con la que se podrían tapizar 524 campos de fútbol y que, pese a reciclarse generan un coste medioambiental relevante. De ahora en adelante este coste va a eliminarse, ya que MRW inicia una campaña de sustitución de los tradicionales sobres de polietileno por otros biodegradables y compostables que pueden depositarse directamente en el contenedor marrón de fracción orgánica.

Los nuevos sobres cumplen la normativa europea EN 13432, la única que actualmente certifica su composición y garantiza su nulo impacto medioambiental. Una de las principales ventajas de los Biosobres es respecto a los sobres de polietileno es que estos últimos, si no se reciclan convenientemente, pueden tardar hasta 500 años en descomponerse, y en cambio los Biosobres MRW tienen garantizada su degradación en menos de seis meses. Además, al tratarse de un material compostable, el residuo final que se genere tras su descomposición será apto como abono, no contendrá residuos tóxicos y su impacto ambiental será nulo.

Esta medida, que convierte a MRW en la primera empresa del sector que utiliza sobres biodegradables y compostables, es parte de la apuesta decidida de la empresa por el medioambiente. La iniciativa, impulsada por el Grupo de Responsabilidad Social de MRW, es un claro ejemplo de cómo la marca toma decisiones y crea productos y Servicios pensando no sólo en el presente, sino también en las generaciones futuras.

El nuevo sobre combina el almidón de maíz y diferentes componentes vegetales
El nuevo sobre está producido a partir de una película de un material denominado biopolímero degradable. Dicha película combina el almidón de maíz y diferentes componentes vegetales y orgánicos. Una vez utilizado y, si se cumplen unas condiciones medioambientales idóneas, el sobre se degrada, es decir, desaparece en menos de seis meses. Tras este tiempo lo único que queda es dióxido de carbono y agua, que se incorporan al ciclo natural sin ningún menoscabo medioambiental.

La marca invertirá más de 900.000 euros en el cambio de embalaje, un coste que asumirá íntegramente la central MRW, dentro de su presupuesto destinado a Responsabilidad Social, por tanto no significará en ningún caso un coste añadido ni para los clientes ni para los franquiciados.
La implantación del nuevo sobre, que reúne todos los certificados de calidad con los que trabaja siempre MRW, llegará de forma progresiva a todas las franquicias del grupo.

Así, durante unos meses convivirán los dos modelos de sobres que utiliza la empresa, los azules de polietileno y los biosobres de color verde. Paralelamente al lanzamiento del biosobre, las franquicias de MRW serán punto de recepción de todos aquellos sobres de polietileno usados. Los sobres serán centralizados en un único punto para facilitar su recogida por parte de un centro especial de empleo que se encargará de su correcto reciclaje.

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