Las verdades acerca de las bolsas de plástico no biodegradables

De hecho, el Gobierno aprobó el Plan Nacional Integrado de Residuos, los borradores del cual proponían suprimir todas las bolsas de plástico no biodegradables de un solo uso en 2010; sin embargo, sólo hace falta salir a la calle para comprobar que a pocos meses de cerrar el año aún son muchos los ciudadanos que pasean por la calle con bolsas de plástico de las más conocidas cadenas de supermercados o tiendas de moda en mano.

Lo que muchas de esas personas no saben es por qué son realmente esas bolsas tan nocivas con el medio ambiente, por ello Greenpeace explica en su web algunas de las “verdades” acerca de este tipo de productos:

- Las bolsas de plástico están fabricadas con derivados del petróleo y con muchas otras sustancias químicas. La extracción y procesos posteriores ligados al petróleo, así como la producción de las bolsas es altamente contaminante; además, una vez se degradan las sustancias son liberadas al medio ambiente.
- La vida útil de una bolsa de plástico es de aproximadamente 12 minutos
- En España sólo el 10% de los residuos sólidos se reciclan y el 77% acaba en los vertederos o en las incineradoras, según el Ministerio de Medio Ambiente.
- Según datos de Cicloplast, cada habitante español consume al año unas 365 bolsas de plástico de un solo uso, lo que implica 15.300 millones de bolsas y unas 100.000 toneladas de residuos.
- Las bolsas de plástico pueden tardar 400 años en degradarse, y una vez lo hacen originan partículas microscópicas que muchas veces entran en la cadena alimentaria, ya que son confundidas con alimentos por muchos animales marinos.
- Otros países de la UE ya han fijado 2010 como fecha para que se eliminen las bolsas de plástico de un solo uso, mientras que España es el primer productor de la UE de bolsas.

La mejor alternativa a las bolsas de plástico son las de tela, las cestas o los carritos, ya que la energía y recursos utilizados para fabricarlos son ampliamente compensados por la infinidad de veces que pueden ser utilizados.
Otras opciones son las bolsas de papel, muy utilizadas en el continente Americano, que pueden biodegradarse en tan sólo algunas semanas y ser fácilmente recicladas.
Sin embargo, la alternativa más innovadora es la de las bolsas de plástico fabricadas a partir de materia orgánica, biodegradables, y con una consistencia similar a las clásicas de plástico de polietileno aunque con 0 efectos nocivos para el medio ambiente.