El año pasado Fundación Balia lanzaba su primera campaña de sensibilización bajo el título “Si no los educamos nosotros, lo harán otros” dónde quería resaltar la importancia de la educación temprana y de calidad como herramienta de prevención ante problemas como el bullying, la delincuencia, las drogas, los embarazos adolescentes, la violencia de género.
Este año la Fundación busca seguir incidiendo en lo más importante para Balia: la educación y la pobreza infantil. Por eso la campaña de este año tiene el lema: “A la pobreza le encanta el fracaso escolar” y tiene como objetivo concienciar sobre la vulnerabilidad que sufren los menores en situación de desventaja social y económica ante el fracaso y el abandono escolar prematuro.
"La existencia de una educación gratuita y obligatoria, no garantiza que la educación sea equitativa y de calidad", apuntan desde la Fundación. "Los menores que no disponen de un entorno social favorable son vulnerables al fracaso y al abandono escolar, de ahí, que casi la mitad de los niños y niñas sin recursos abandonen los estudios antes de tiempo", según el informe 'Necesitas mejorar' de Save the Children del 2016.