Con el objetivo de contribuir a reducir el número de personas que todos los años se ven afectadas por los accidentes de tráfico, Fundación MAPFRE ha presentado el plan “La seguridad de los vehículos y el nuevo plan estratégico de seguridad vial: cómo evitar 50.000 accidentes al año”, en colaboración con la Asociación para el Estudio de la Lesión Medular Espinal (AESLEME), STOP Accidentes y TRACK Surveying Solutions.
Y es que es necesario que la nueva estrategia española de seguridad vial cuente con los últimos avances en las tecnologías de seguridad de los vehículos, especialmente con los nuevos sistemas de asistencia a la conducción conocidos como ADAS, por sus siglas en inglés, (Advance Driver Assistance Systems). Según un estudio de la DGT, hasta un 57% de los accidentes podrían evitarse si los vehículos estuvieran equipados con estos sistemas.
Se propone así que los vehículos estén equipados lo antes posible con los últimos avances tecnológicos en materia de seguridad activa y pasiva. Se debe propiciar que los nuevos coches cuenten de serie en todos los vehículos con sistema de detección de riesgo de atropello de peatones y ciclistas. Su implantación generalizara podría evitar más de 7.500 atropellos.
También se aboga por el uso de dispositivos de detección de riesgo de colisión frontal con otros vehículos u obstáculos, tanto aquellos que alertan al conductor como aquellos con frenado automático. Con este sistema se podrían haber evitado más de 10.000 accidentes en 2015.
El sistema de alerta de cambio involuntario de carril podría tener su impacto sobre más del 60% de los accidentes que se produjeron por salidas de la vía y también influiría de manera significativa el uso generalizado de cámaras de marcha atrás, sistemas de vigilancia del ángulo muerto y sistemas de detección de peatones, ciclistas y motocicletas para vehículos pesados. Igualmente, los detectores de fatiga y sistemas de evitación de distracciones contribuirían a una reducción de los accidentes de tráfico en España.
Se aboga por la implantación de estos sistemas en los vehículos nuevos pero también en lo que ya están en circulación, ya que la tasa de renovación de la flota en España no llega al 5% anual y solo el 20 % de los modelos comercializados llevan como opcionales algunas de las funciones ADAS principales. En palabras de Elías Izquierdo, CEO de TRACK Surveying Solutions, "Los sistemas ADAS no deben ser una opción, sino que deberían ser obligatorios en todos los vehículos."
También se propone fomentar las tecnologías encaminadas a la ayuda al conductor sobre la elección de velocidades seguras, es decir, sistemas ISA o adaptación inteligente de velocidad, así como la instalación de cajas negras, limitadores de velocidad y sistemas alcolocks en los vehículos de conductores profesionales, en los coches de personas con problemas de adicción al alcohol y en los vehículos de titularidad de las administraciones.
Por supuesto, para renovar el parque automovilístico es necesario impulsar un nuevo Plan PIVE que facilite la compra de nuevos coches más seguros y ecológicos y que los apoyos vayan en función de los niveles de equipamiento adicionales de estos vehículos.
En este sentido, es muy importante que los incentivos a la compra de vehículos seguros no incrementen el precio medio final y que estos incentivos premien a aquellos que cuenten con más sistemas avanzados.
Todas estas propuestas se han entregado en un documento a la Dirección General de Tráfico del Ministerio del Interior y a la Comisión de Seguridad Vial y Movilidad Sostenible del Congreso de los Diputados.
“Juntos seguimos luchando por mejorar la seguridad vial y la prevención de accidentes.” Jesús Monclús, director del área de Seguridad Vial de Fundación MAPFRE.
