La “ecuación del antropoceno” ha sido desarrollada conjuntamente con el profesor Will Steffen, un experto en cambio climático e investigador en la Universidad Nacional de Australia, y publicada en la revista The Anthropocene Review.
Los autores del artículo aseguran que durante los últimos 4.500 millones de años los factores astronómicos y geofísicos han sido las influencias dominantes en el sistema terrestre. Pero durante las últimas seis décadas las fuerzas humanas "han impulsado tasas de cambio excepcionalmente rápidas en el sistema terrestre", apuntan los autores, dando lugar a un período conocido como el Antropoceno. "Las actividades humanas ahora rivalizan con las grandes fuerzas de la naturaleza al impulsar cambios en el sistema terrestre", publica The Guardian.
Steffen y su co-investigador, Owen Gaffney, del Centro de Resiliencia de Estocolmo, han elaborado una "Ecuación Antropocénica" para determinar el impacto de este período de intensa actividad humana en la Tierra. Según Gaffney, lo han desarrollado "centrándose en la tasa de cambio del sistema de apoyo a la vida de la Tierra: la atmósfera, los océanos, los bosques y los humedales, las vías fluviales y las capas de hielo y la fabulosa diversidad de vida".
"En la ecuación, las fuerzas astronómicas y geofísicas tienden a cero debido a su naturaleza lenta o rareza, al igual que la dinámica interna, por ahora. Todas estas fuerzas todavía ejercen presión, pero actualmente en órdenes de magnitud menor que el impacto humano ".
Según Steffen estas fuerzas han conducido una tasa de cambio de 0.01 grados centígrados por siglo. Las emisiones de gases de efecto invernadero causadas por los seres humanos en los últimos 45 años, por otro lado, "han aumentado la tasa de aumento de temperatura a 1,7 grados centígrados por siglo, empequeñeciendo la tasa de fondo natural", asegura. Esto representa un cambio en el clima que es 170 veces más rápido que las fuerzas de la naturaleza.
"La magnitud humana del cambio climático se parece más a una huelga de meteoritos que a un cambio gradual". Gaffney y Steffen describen que si bien el sistema de la Tierra había demostrado ser resistente, logrando millones de años de relativa estabilidad debido a las complejas interacciones entre el núcleo de la Tierra y la biosfera, sería poco probable que se superara el impacto de la sociedad. La falta de reducción del cambio climático antropológico podría "desencadenar el colapso de la sociedad", concluyen sus investigaciones.