Las ventajas de incluir la diversidad en las políticas, estrategias, cultura y valores corporativos son varios. Según un artículo publicado por Harvard Deusto, algunas de ellas son una mayor creatividad, un aumento de la reputación y la productividad, un incremento de la capacidad empresarial para atraer el talento y una mayor fidelización de los empleados, así como una mayor amplitud de ideas, perspectivas y enfoques a la hora de proponer soluciones a problemas o crisis. En definitiva, contar con equipos multiculturales supone invertir en innovación y creatividad.
En España, por ejemplo, las principales motivaciones que llevan a una compañía a invertir en diversidad se encuentran, según un informe encargado por la Asociación Española de Directores de Recursos Humanos (AEDRH), vinculadas a disminuir la desigualdad en materia de género (en 81% de los casos), discapacidad (57%), raza u origen étnico (56%) y edad (48%).
Además, un 92% los relaciona con a la reputación de la empresa, la imagen corporativa o las buenas relaciones con la comunidad; un 88% los vincula a temas de mejora de la contratación y atracción del talento; y un 79% a ventajas competitivas.
En contrataste, los beneficios ligados a una mejora de las estrategias comerciales y de márketing de su empresa o de la relación con sus grupos de interés, aparecen como cuestiones a los que la diversidad afecta de manera escasa.