En esta edición participaron Cooperación Internacional, Caritas, Asociación Española Contra el Cáncer, Sauce, Prójimo Próximo, Fundación Síndrome Down de Madrid, Soñar Despierto, Fundación Manolo Maestre, Fundación del Valle, Fundación Promoción Social de la Cultura, Turkana, Fundación Lo Que De Verdad Importa, Fundación Infancia, Asociación Akafi, Hospitalidad de Lourdes, Down España, Soñar Despierto, Fundación Manolo Maestre, Fundación Emalaikat, Fundación Madrina, Fundación Humanae, Manos Unidas y la Comunidad de Madrid, a través de la Subdirección General de Voluntariado, Cooperación Internacional y RSC.
Ana Moreno, Jefe de Estudios y responsable de IEB Solidario ha destacado "la solidaridad hoy en día también puede considerarse un componente reputacional para las empresas. Muchas de ellas canalizan a través de sus Fundaciones un patrimonio que se invierte en fomento del conocimiento y en investigación. En EE.UU., por ejemplo, el sector fundacional es pionero en ello. Las Fundaciones impulsan la investigación a través de las universidades y es un sector muy consolidado con inversiones sólidas que contribuyen al crecimiento sostenible de la sociedad. Esta finalidad debería perseguirse también en Europa y, nosotros pretendemos poner un granito de arena como institución de formación".
El IEB ha formado más de 85.000 alumnos en una gran variedad de temas y, además de formación técnica también considera la formación humanística de sus alumnos. Con esta iniciativa el IEB quiere ser un vínculo de integración de los alumnos con la labor social, más allá de su paso por el centro de estudios, para que estos aprendan acerca de cómo hacer perdurar los fines sociales fundacionales hacia generaciones futuras. "La responsabilidad social es una asignatura pendiente que se debe fomentar desde el ámbito educativo", prosigue Moreno.
Marisa Elosua, Coordinadora del Departamento de Empresas y Relaciones Institucionales de Manos Unidas, ha destacado que "es importante acercar a los estudiantes a la realidad de la pobreza, que se sensibilicen con la situación de desfavorecidos más allá de su entorno. Ahora mismo con la crisis de los refugiados atendemos a colectivos de Siria e Irak en Jordania y contar esta realidad es lo que nos mueve a participar en el IEB Solidario".
María Paz Sanz Martínez, coordinadora de voluntariado de La Asociación Española Contra el Cáncer, que ha participado en varias ediciones del IEB Solidario, comenta que "además de voluntad se necesita carácter, ya que al tratarse del apoyo de los jóvenes a niños se requiere formación básica de voluntariado que les permita desarrollar bien ese apoyo social. Desde IEB Solidario buscamos perfiles de voluntarios que nos ayuden a mejorar la calidad de vida de las personas".
Desde la Comunidad de Madrid destacan que "participamos en este tipo de iniciativas para dar visibilidad a las empresas y particulares que fomentan el voluntariado. A su vez, servimos de plataforma de encuentro entre las fundaciones para ayudarlas a establecer redes de colaboración que les permitan seguir creciendo".