Entre los veinte países mejor clasificados del ranking mundial de 178 países –encabezado por Estados Unidos y Singapur- sólo hay dos europeos en 2016: Dinamarca y la República Checa. A continuación se sitúan Austria e Irlanda, así como el Reino Unido y Bulgaria, todos ellos con puntuaciones todavía por encima de 70. Finlandia, Malta, Suecia e Italia ya sólo llegan a unos 53 puntos.
España ocupa el puesto 22 de la UE y el 126 de la clasificación mundial. El informe de la Fundación Heritage afirma “que las leyes laborales siguen siendo inflexibles” en nuestro país. Peor que nosotros están Alemania, Grecia, Francia y Portugal que tienen un mercado laboral todavía más rígido, ocupando los últimos lugares de la UE Luxemburgo y Croacia.