Según informan desde el portal GreenBiz, estas estrategias han sido mostradas y explicadas en el marco del Sustainable Packaging Forum y del encuentro anual de otoño de la Sustainable Packaging Coalition, celebrados recientemente en Tampa. Como se ha señalado anteriormente, han sido cinco las que han destacado entre las propuestas de los expertos.
La primera de ellas consiste en adoptar un enfoque que incluya todo el ciclo de vida del envase. Eso significa que el gasto de recursos y las emisiones de CO2 que genera el envase son tenidas en cuenta desde su diseño inicial.
La segunda exige tener en cuenta la relación entre el producto y su envase. Un embalaje inadecuado puede hacer que el producto se estropee, por ejemplo, pero una excesiva prevención resulta en un empaquetado sobredimensionado. En este sentido, señalan desde GreenBiz, las compañías están estudiando cuál es la medida adecuada y el material con el que deben ser envueltos los productos.
La tercera iniciativa que destaca consiste en una comunicación efectiva de la sostenibilidad de los envases a través del etiquetado. Esto es especialmente importante para lograr que los consumidores entiendan cómo tratar un envase una vez ha acabado su ciclo de vida.
Por último, la cuarta y la quinta estrategias coinciden con la solución de muchos otros problemas. Se trata de la creatividad y el intercambio de ideas. En este caso, la creatividad está siendo utilizada para hacer los envases más sostenibles y fomentar la innovación. En cuanto al intercambio de ideas, desde GreenBiz señalan que las compañías están colaborando cada vez más con ONG, asociaciones industriales, grupos de trabajo y otras empresas para incorporar nuevas ideas en la sostenibilidad de los envases.
