“Las discusiones entre los miembros del gobierno han concluido en el abandono del proyecto de pesca de ballenas”, ha declarado un portavoz para Yonhap. Además, este portavoz, que no ha revelado su nombre, señala que “incluso aunque sea para investigación científica, debemos ser conscientes de que la caza de ballenas es un tema delicado, tanto aquí como en el extranjero”.
Según informa el diario Libération, esta decisión ya se había dejado entrever la semana pasada, cuando el ministro Kang Joon-Suk dijo que el proyecto tenía muchas posibilidades de ser abandonado.
Seúl había provocado la indignación de los ecologistas anunciado a principios de mes que se retomaría y legalizaría la caza de ballenas, después de 26 años de prohibición. Como Japón, Corea justificó su decisión explicando que las campañas se realizarían en el marco de “investigaciones científicas”, pero la carne podría después venderse y consumirse.
Actualmente, sólo tres países cazan ballenas de manera oficial: Japón, por motivos supuestamente científicos, y Noruega e Islandia, que no respetan la prohibición.
Ver también: Corea del Sur retoma la caza de ballenas para la 'investigación científica'
