agricultura sostenible

“Compromiso Harmony”, la apuesta por la agricultura sostenible de Mondelēz International

30/10/2016 Con el objetivo de dar respuesta a las expectativas de un nuevo perfil de consumidor responsable y preocupado por el origen de los productos, en el año 2008 Mondelēz lanzó “Compromiso Harmony”. Esta iniciativa se centra en el cultivo sostenible del trigo con el objetivo de garantizar su calidad a la vez que se promueve la protección por el medio ambiente.

Promovido por la categoría de galletas de la compañía, la iniciativa se centra en el ingrediente principal que se utiliza para su elaboración: el trigo. Basándose en principios de producción integrada, esta iniciativa va un paso más allá en su apuesta por el cultivo sostenible del trigo y tiene como objetivo mejorar su calidad, crear un suministro de trigo local cercano a las plantas de fabricación y, sobre todo, apostar por el medio ambiente promoviendo la biodiversidad. De este modo, “el proyecto pretende mejorar la calidad del trigo con el que se elaboran los productos de Mondelēz y limitar el impacto ambiental de su producción, preservando la biodiversidad, al mismo tiempo que se apuesta por los proveedores locales”, explica el director de responsabilidad corporativa para Europa Occidental de Mondelēz International, Ricardo Hernández.

En España, el proyecto “Compromiso Harmony” comenzó su andadura en 2011. Desde entonces y “gracias a la colaboración de agricultores y harineros, ya se han cosechado más de 78.690 toneladas de trigo Harmony en campos de Navarra, Aragón y Castilla y León”, comenta Ricardo Hernández.

Los agricultores, stakeholder clave
Los agricultores forman parte del proyecto a través de la incorporación de la “Carta de Calidad Harmony” a su trabajo diario. “Esta carta está compuesta por 51 recomendaciones de buenas prácticas que se agrupan en diferentes temáticas y que se revisan y mejoran cada año en un proceso de diálogo permanente con los agricultores participantes en el proyecto. Su cumplimiento es un requisito obligado por parte de los agricultores locales participantes e indispensable para poder proveer de trigo a las galletas Fontaneda, vinculadas a la iniciativa”.

De este modo, el proyecto colabora con proveedores locales que están próximos a las plantas de producción de galletas de la compañía lo que proporciona un apoyo a la economía local. Actualmente, participan en el proyecto más de 170 agricultores de cooperativas pertenecientes a la cooperativa agraria Grupo AN y a Cereales Teruel.

“El proyecto es beneficioso por dos razones de peso –comenta Ricardo Hernández–. Garantiza la trazabilidad, es decir, todos los pasos por los que ha pasado el trigo utilizado en la elaboración de las galletas. Por ello, se aseguran todas las etapas de la cadena de producción, desde la siembra del trigo en las diferentes áreas de cultivo hasta la elaboración final del producto en la planta de fabricación. En cuanto al componente medioambiental, se preserva la biodiversidad y para ello, los agricultores adscritos al programa dedican el 3% de sus campos al cultivo de flores, con el fin de favorecer la supervivencia de las poblaciones de abejas y asegurar la polinización” . Concretamente, las más de 631 hectáreas destinadas al cultivo de flores que se han cultivado hasta la fecha han ofrecido, este año, hábitat a 14 especies diferentes de mariposas por cada parcela y se han alimentado más de un millón de abejas.

Un proyecto de largo recorrido
Tal y como explica el director de responsabilidad corporativa para Europa Occidental de Mondelēz International, “Compromiso Harmony es un proyecto a largo plazo, en el que también se irán incorporando progresivamente otras marcas del portafolio de galletas que la compañía comercializa en España”. De hecho, en la actualidad, las marcas que cuentan con el sello de Compromiso Harmony son La Buena María, Digestive, Osito Lulú y Marie Lu. Este año está prevista la incorporación de las enseñas Belvita Desayuno y Fruit & Fit, con lo que se espera que el proyecto se extienda al 99% de la producción de galletas de Mondelēz.

Esta estrategia responde, en buena medida, al incremento de los modelos de negocio sostenibles que se ha evidenciado a lo largo de la última década. En palabras de Ricardo Hernández, “el hecho de que cada vez más empresas nos preocupemos de este aspecto no sólo responde a una nueva tendencia de consumo sino a una demanda social. Cada vez son más los consumidores sensibilizados y comprometidos con la necesidad de cuidar del entorno. Estos clientes reclaman procesos de producción respetuosos con el medio ambiente y saludables. Desde Mondelēz queremos incorporar esta garantía a través de nuestros procesos, y esperamos que nuestros productos cada vez lleguen a un mayor número de personas de todo el mundo”.

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