La avaricia de los grandes ejecutivos ha sido uno de los motivos de la crisis

Mª Àngels Vallvé,

presidenta de GVC Gaesco

25/03/2010

Mª Àngels Vallvé, presidenta de GVC Gaesco, sociedad especializada en servicios de inversión, lo tiene claro. Es el abuso de cualquier producto financiero el que lleva a una crisis económica como la actual, donde también ha confluido “la avaricia de los principales ejecutivos” de las grandes empresas que, según Vallvé, han llevado a sus compañías a situaciones límite. Sobre RSC, Vallvé apunta que en su sector “ser responsable es tratar de asesorar y de ayudar a las personas con ahorros a que los inviertan de la mejor manera posible de acuerdo con sus circunstancias”.

CAUSAS DE LA CRISIS ECONÓMICA ACTUAL

¿Cuáles han sido las principales causas de la crisis económica actual?

Entre los principales motivos está la necesidad de financiación de los grandes estados, principalmente de los Estados Unidos, que terminó provocando unos tipos de interés muy bajos. Como consecuencia, la banca, y en especial la de inversión, experimentó un descenso de su margen de intermediación y se vio forzada a inventarse productos cuyas comisiones compensasen el decrecimiento de sus beneficios. Pero, sobre todo, uno de los grandes motivos de esta crisis ha sido la gran avaricia de los principales ejecutivos de las grandes empresas, porque las han llevado a situaciones extremas. En nuestro país, además, la crisis financiera, que sí provenía del exterior, se unió a las consecuencias de las barbaridades que se habían hecho en el sector inmobiliario. Ahora pagamos los excesos de cuando se construía más que en Alemania, Francia e Inglaterra juntas. Todas las crisis, al final, lo son por abuso de la creación de productos financieros con excesivo margen.

¿Qué supondrá para la economía?

Esta crisis ha sido tan profunda que no solamente es económica, sino también de valores. El mundo tiene que reaccionar de otra manera, con valores distintos. Debemos ser todos mucho más conscientes de cuál puede ser el mundo en el que van a vivir nuestros hijos y nuestros nietos y, por lo tanto, trabajar con mayor responsabilidad.

¿Qué significa ser responsable en el sector financiero y de la intermediación?

Básicamente supone, en el momento de comprar y vender en el mercado, hacerlo conociendo la información real sin aplicar una determinada información privilegiada de la que se pueda disponer. Pero, sobre todo, actuar con una gran ética. En nuestro mundo, ser responsable es tratar de asesorar y de ayudar a las personas con ahorros para que los inviertan de la mejor manera posible de acuerdo con sus circunstancias. Y es que no porque en un producto tenga un mayor margen de beneficio es adecuado para todos los inversores. Se trata de trabajar responsablemente ofreciendo lo mejor para cada persona. Y más teniendo en cuenta que actualmente el sector financiero se ha hecho muy popular y que hay mucha gente con acciones, fondos de inversión o de pensiones. Puede que incluso sean personas que no conocen bien cuáles son los objetivos últimos de esos productos. Es en ellos en donde tenemos que intensificar más nuestro asesoramiento para que su inversión sea lo más beneficiosa posible.

El ciudadano de a pie tiende a considerar al sector financiero en general como especulativo. ¿Es necesario reivindicar su papel?

Es cierto que para algunas personas nuestra actividad es algo sucio, poco transparente, solamente conocido por los iniciados y que no favorece al mundo real. Pero las finanzas aparecieron para asegurar las incertidumbres que podía tener la actividad económica real en un determinado momento. Y esto es lo que tenemos que reivindicar. Por poner un par de ejemplos: en la Edad Media apareció la letra de cambio para que no hubiera transportes de dinero de una ciudad a otra evitando así el riesgo de que pudieran ser robados; o los bancos de depósito nacieron para resguardar el dinero de los ciudadanos y, las sociedades anónimas, para diversificar el riesgo. Son tan sólo algunos ejemplos del hecho de que el sector financiero está al servicio de la economía real.

LOS GRANDES AFECTADOS

¿Quiénes han sido los grandes afectados por esa crisis?

No han sido sólo aquellas personas que tenían invertido su dinero en acciones, sino que las que han perdido la totalidad de sus ahorros han sido aquéllas que tenían el dinero invertido en renta fija. Se trata de personas mucho más conservadoras que no querían arriesgarse en el mundo de las acciones y han terminado pagando los platos rotos.

¿Por qué han perdido más aquellas personas que invirtieron en productos de renta fija?

Porque en el fondo, cuando se invertía en productos de renta fija, se estaba invirtiendo en unas garantías de unas hipotecas y se daba una rentabilidad del 4, 5 o 6%. Pero en el momento en que los tipos de interés cayeron al 1 o el 2%, los gestores creyeron que era interesante invertir en productos que aumentaban la rentabilidad. En el momento que estalló la crisis, los bancos, sobre todo los anglosajones o los europeos, tenía unos activos que dejaron de valer y en sus balances hubo una gran perdida. Los bancos españoles, en cambio, no tenían estos activos, porque nuestra economía, basada en el crecimiento del sector inmobiliario, no necesitaban invertir en ellos puesto que ya invertían en las propias hipotecas. Ahora, no obstante, con la crisis inmobiliaria, tienen el goteo que provoca la morosidad de las personas que pierden el empleo y no pueden asumir los gastos de la hipoteca.

La solidez del mercado bancario español ha sido modelo en otros países. Pero, si aquí hubiera habido la necesidad de acudir a intereses más favorables porque la burbuja inmobiliaria no hubiera existido, no sabemos cómo hubieran actuado los bancos...

Seguramente hubieran invertido también en estos productos nocivos. Aún así, es verdad que el Banco de España desde hace años dispone de una regulación muy estricta del sistema financiero y bancario español, lo que nos ha salvado de muchos sustos.

¿Invertir en proyectos sostenibles o responsables empresarialmente es rentable a largo plazo?

Sin duda sí. Normalmente, aquellas sociedades que de repente han tenido muchos beneficios con métodos poco ortodoxos al final terminan desapareciendo. Es cierto que ser responsable y sostenible en nuestro sector, a corto plazo parece no ser rentable. Pero, sin lugar a dudas, con el tiempo es la mejor forma para sacar adelante la sociedad.

EL POLÉMICO MERCADO DE DERIVADOS

Existe una cierta polémica alrededor del mercado de derivados. ¿Qué porcentaje de la causa de las fluctuaciones de los precios de alimentos es debido a la especulación y cuál debido a una diferencia entre oferta y demanda?

El mercado de derivados es complicado, pero a la vez muy necesario, puesto que asegura la incertidumbre de los precios de las materias primas por causas naturales.

Es cierto, no obstante, que para que las compras y ventas de contratos de derivados se realicen tiene que haber alguien que compre y venda. Y no todos son productores, sino que existe también la figura del especulador, que no es ninguna figura peyorativa porque da liquidez al mercado; eso sí, siempre que actúe correctamente. Si al final el volumen de especulación es tan y tan grande que supera de manera sustancial el volumen de la cosecha del maíz entonces es cuando llegamos a una subida de precios y a una burbuja.

¿Podemos concluir que por un exceso de especulación en el mercado de derivados de alimentos se esté produciendo el hecho de que aunque el 2008 fuese un muy buen año de cosecha mundial el precio de los alimentos subió exponencialmente, con lo cual también el número de personas que murieron por desnutrición?

No sé si solamente es consecuencia de la especulación puesto que en la distribución de los alimentos hay una cantidad enorme de intermediarios que lo encarecen substancialmente. Es terrible cuando sabes la cantidad de gente que muere por mala nutrición en el mundo y ves como se están tirando los alimentos porque el precio que se paga al productor convierte la actividad en insostenible para dicho productor. Y esto no es el mercado financiero, es la economía real. Es por eso que tenemos que ser todos mucho más responsables; siéndolo cada uno de nosotros en nuestra esfera particular podemos hacer que el mundo de nuestros hijos y nietos sea mejor.

¿Qué habría que hacer a nivel internacional, para que el consumidor final no se vea afectado por estas subidas de precio? ¿Se podría regular el múltiplo financiero del volumen real de los mercados de derivados?

No hay manera de regularlo, aunque seguramente se tendría que llegar a unos macroacuerdos muy importantes entre estados. Pero regularlo es muy difícil ya que también debe existir la posibilidad y libertad de equivocarse. Es duro, pero debe ser así.

Pero ¿no es posible evitar abusos de alguna manera?

Sí, claro, penalizándolos.

¿Cómo?

Seguramente aplicando con mayor severidad la regulación que ya existe. Además, muchos de estos especuladores tienen en su propia cartera su penalización. No pensemos que todos los que están especulando se hacen multimillonarios, en el fondo muchos pierden cantidades enormes de dinero. Lo que pasa es que en nuestro mundo sólo vemos el que ha triunfado y ha ganado dinero.