ENTREVISTA

Apostamos por DNV para verificar nuestra huella de carbono


María García Villán,

directora de Sostenibilidad de CEMEX España

María García Villán 29/04/2011

Cemex ha contado con el soporte de la empresa certificadora DNV (Det Norske Veritas) para calcular y verificar su huella de carbono. La metodología, verificada en nueve plantas de la compañía, ya se ha implementado en 629 centros de producción de cemento, hormigón y áridos a nivel mundial, representando un 58% del total de la producción. María García Villán, directora de Sostenibilidad de Cemex España, asegura que DNV es “una gran entidad de verificación y un buen compañero de viaje”.

¿Qué llevó a CEMEX a realizar el cálculo del impacto total de las emisiones de sus productos?

CEMEX tiene la lucha contra el cambio climático como uno de los pilares principales de su estrategia de sostenibilidad. Nosotros pertenecemos al World Business Council y dentro de él a una iniciativa del grupo cementero, el “Cement Sustainability Initiative”, cuyo objetivo es mitigar o reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. El siguiente paso que quisimos dar fue el cálculo total de la huella de carbono de nuestros productos, incluyendo todos los gases de efecto invernadero emitidos de manera directa o indirecta en todo el proceso productivo.

¿Por qué apostaron por una verificación externa e independiente a cargo de DNV?

Apostamos por DNV por su estrategia a nivel mundial, su alcance internacional y su experiencia en proyectos de reducción de emisiones voluntarias: el 40% de los mecanismos de desarrollo limpio a nivel mundial ha sido verificado por ellos. Además, ya les conocíamos con anterioridad por los mecanismos de desarrollo limpio que tenemos en diversos lugares del mundo, con lo que sabíamos de su experiencia y trayectoria.

¿Qué etapas ha tenido el proceso?

Al no saber a lo que nos enfrentábamos, iniciamos el proyecto con una fase de análisis y de estudio. Con el soporte y la experienci de DNV desarrollamos unas metodologías muy amplias y exactas siguiendo protocolos internacionales como la PAS 2050:2008 británica, el draft de la ISO 14067 de la huella de carbono y el GHG Protocol de las Naciones Unidas. Calculamos así la huella de carbono del año 2009 en todas nuestras plantas de cemento a nivel mundial, que son cerca de 70; en la mitad de nuestras canteras del negocio de áridos; y en un tercio de nuestras plantas de hormigón. En la segunda fase, que llevaremos a cabo durante 2011, calcularemos la huella para el año 2010 y trabajaremos para disponer de ella en el 100% de nuestras plantas y productos.

¿Qué ventajas tiene, de cara a sus clientes, el conocimiento de la huella de carbono?

Nuestro primer objetivo era conocer la huella de nuestros productos, desde las materias primas hasta el envasado, pasando por el transporte y la producción, con el fin de apoyar nuestras metas de reducción de emisiones. Con la co municación de la huella a nuestros grupos de interés, ofrecemos a nuestros clientes la oportunidad de escoger para sus obras aquellos productos que dispongan de una huella menor y que sean acordes con las características de su edificio.

¿Cómo se relaciona la huella de carbono con sus productos puestos en obra?

Actualmente disponemos de dos herramientas: el cálculo de la huella de nuestros productos hasta la puerta de nuestra fábrica, y la que incluye el transporte. La primera de ellas sigue el enfoque de “Cradle to gate”, incluyendo la generación de las materias primas a partir de los recursos naturles (“Cradle”) y su transporte, pasando por la elaboración y envasado (si es necesario), hasta el momento en que el producto abandona las instalaciones de CEMEX (“Gate”). La segunda añade el transporte del producto de manera que podamos ofrecer a nuestros clientes una huella puesta en obra incluyendo el transporte.

¿La herramienta desarrollada por CEMEX y validada or DNV es replicable en otras empresas del sector?

La herramienta podría ser utilizada por cualquier empresa del sector y para cualquier producto, porque está basada en una metodología validada y contrastada a nivel mundial. CEMEX ha sido la primera empresa del sector en aplicarla, pues la lucha contra el cambio climático es un pilar estratégico dentro de la compañía y conocer la huella de todos nuestros productos es el primer paso para reducirla. Por otro lado, sabemos la importancia que nuestros clientes conceden a esta información para poder reducir el impacto de sus obras. Conocer la huella sólo conlleva ventajas, y estoy segura de que nuestros competidores también lo ven así y estarán trabajando en ello.

El proyecto ha sido un hito para CEMEX. ¿Cuáles son los siguientes?

CEMEX quiere continuar avazando en su estrategia contra el cambio climático, por lo que el conocimiento del impacto medioambiental durante todo el ciclo de vida de nuestros productos es esencial, así que probablemente contaremos con DNV como partner en el futuro.

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