04/04/2014 12:40:00

La contaminación lumínica española vista desde el espacio

Sierra Morena y el sur de Jaén los mejores sitios para ver las estrellas

Madrid, Sevilla o Zaragoza, así como la costa del Mediterráneo son las zonas iluminadas que suponen un mayor desperdicio económico. Muchas de las luminarias con las que contamos están mal colocadas o son muy contaminantes. Por ejemplo, las farolas en forma de globo que envían la luz hacia todas partes menos hacia abajo, lugar donde es fundamental iluminar.

Andalucía es el lugar donde se ve el cielo con mayor claridad. En Sierra Morena y la Sierra Sur de Jaén han sido reconocidos 67 términos municipaleszonas con la certificación internacional Reserva Starlight. Esta distinción, auspiciada por la Unesco, avala la calidad del cielo nocturno de los territorios y su idoneidad para la práctica de la astronomía y observación de las estrellas en las mejores condiciones, según publica Europa Press.

Conseguir esta certificación no ha sido fácil, fue preciso realizar un estudio exhaustivo de los niveles de oscuridad del cielo de ambos territorios, con más de 750.000 medidas tomadas a lo largo de más de 2.500 kilómetros y durante un periodo de nueve meses. Estos trabajos correspondieron al consorcio Dark Sky Advisors (DSA), formado por la Asociación Astronómica Hubble y la consultora Iberus Medio Ambiente.

El objetivo del sistema de certificación Starlight es poner en marcha experiencias ligadas a la observación astronómica y fomentar un turismo responsable que preserve las condiciones medioambientales y la iluminación natural de los espacios distinguidos, y evitar así un mayor consumo energético.

Estas dos regiones andaluzas pasan a formar parte de este exclusivo grupo de destinos y son acreditas como zonas del planeta con las condiciones idóneas para la contemplación de cielos estrellados y la práctica de actividades turísticas basadas en ese recurso. "Ésta es la más grande del mundo (con este reconocimiento)", ha subrayado el secretario general para el Turismo, Vicente Granados.

Otros destinos
Pero hay muchos más, entre los destinos Starlight se encuentran el Lago Tekapoo en Nueva Zelanda o el Parque Nacional Fray Jorge en Chile, Alqueva en Portugal. En nuestro país existen zonas como la Reserva de la Biosfera Valles del Leza, Jubera, Cidacos y Alhama (La Rioja); Gredos; Granadilla de Abona en la isla de Tenerife y La Palma en Canarias o Montsec (Lleida).
El sistema de certificación Starlight se creó con el objetivo de poner en marcha experiencias ligadas a la observación astronómica y fomentar un turismo responsable que preserve las condiciones medioambientales y la iluminación natural de los espacios distinguidos, y evitar así un mayor consumo energético.

Para ver el cielo, hay que estar a oscuras
Hay muy pocos los lugares donde la oscuridad es total y la contemplación de estrellas sea perfecta. Conseguir zonas con esta certificación supone un paso adelante en cuanto a lo que se refiere a la falta de contaminación lumínica y el despilfarro económico en materia de iluminación.
Según informa ABC, las estadísticas han demostrado que una gran ciudad podría ser iluminada eficazmente con la mitad de las luminarias que tiene, si todas ellas cumplieran la normativa que se integra dentro de la ley contra la contaminación lumínica. Ley que existe, pero no se cumple; forma parte de la normativa de varias comunidades autónomas como Cataluña o Andalucía, pero su aplicación es escasa. Donde se cumple rajatabla es en la isla de la Palma y la mitad de la isla de Tenerife. Ahí se asientan los mayores observatorios del mundo, y hasta los aviones deben modificar su trayectoria para no interferir en las investigaciones de los observatorios.

Si todas nuestras farolas cumplieran la normativa en materia de contaminación lumínica, no solo veríamos el cielo en mejores condiciones, sino que nos ahorraríamos la mitad del dinero que pagamos en alumbrado público. La contaminación lumínica es un doble y grave problema. Por un lado supone un despilfarro económico hacia el espacio exterior y por otro, nos quedamos sin cielo. En una gran ciudad es imposible ver las estrellas, pero desde un lugar Reserva Starlighse se observan miles a simple vista. Si quieres ver las estrellas y vives en Madrid, por ejemplo, tendrás que ir hasta la provincia de Toledo..

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