Con esta iniciativa, la empresa espera lograr en 2020 una reducción de dichas emisiones en sus procesos de producción de un 40% con respecto a los niveles de 2009, lo que equivaldría a unos 20 millones de toneladas anuales; y prevé reducir 30 millones de toneladas anuales más debido al menor consumo energético de sus productos.
LG también reducirá el gasto eléctrico de sus oficinas centrales de Seúl un 45%, sustituyendo los fluorescentes por bombillas de LED, y se ha fijado como objetivo incrementar la producción de paneles solares, productos para la iluminación de última generación y otras energías ecológicas durante la próxima década. En este sentido, hace unos meses lanzó el teléfono móvil LG GD510, que se puede recargar con energía solar, que ya ha superado el millón de unidades vendidas.
